Hace un par de semanas cuando me termine en el mismo día Ligero de equipaje de Ian Gibson, buscando su libro sobre la muerte de Federico García Lorca, me encontré de bruces con esta obra de teatro con la que quiero inaugurar la semana y que hace que siga manteniéndome en mi propósito de leerme clásicos, ya no solo de teatro, sino de poesía, novela... Y Luces de bohemia, fue un planazo, porque hacia unos 17 años que no me lo leía, y ahí en el metro fui descubriendo las anotaciones de una joven Natalia que se formaba en teatro e interpretación.
"El Madrid absurdo, brillante y hambriento de Luces de Bohemia se despliega aquí y le invita a recorrer sus calles en compañía del mismísimo Max Estrella.
El poeta loco, ciego y furioso, apura su última noche seguido por su corte de bohemios, Hamletos, y algún que otro cráneo previlegiado. Una butaca de primera fila para descubrir, además de los lugares del esperpento, los cafés cantantes, los estrenos y disputas de los teatros de variedades y las ingeniosas crónicas de la prensa de la época".
Una obra de humor, constante movimiento, pillaje, miseria, esperpentos con Max Estrella como protagonista de una historia peripatética y con Hispano como escudero de una noche que como dice la canción de Dani Martín, puede ser la última de sus vidas.
Un libro lleno de referencias a lo que es ser intelectual y pobre...
Un libro lleno de "chistes" de la época llenos de soeces...
Un libro lleno de esperpentos...
Un libro lleno de sueños o recuerdos de un pasado cada vez más tardío...
Un libro lleno de Madrid, sus calles, callejones y bares...
Una obra de teatro que sino habéis leído, deberíais hacerlo, y sí la habéis leído, volver a hacerlo, teniendo muy presente el contexto de la época, porque hay escenas y palabras para coger aire...
Un beso enorme, feliz semana y espero veros mañana para compartiros como hace una semana todo se paro :) :) :) :) :)