Hay veces que siento y corroboró que para determinadas aficiones no tengo remedio, y desde que soy muy pequeña los libros ha sido mis grandes cómplices vitales, refugiándome en ellos, viajando, volando y conociendo personajes que nunca antes ni había oído o no les había puesto el interés que merecían.
Hace unos meses os hablé de la librería nueva que abrieron hace un año y medio en Ciudad Lineal - Librería Taiga - y ya no solo por ser un lugar tranquilo y plácido que lo es, sino que su desván de libros era algo impresionante. El mes pasado llamé para encargar Política sexual de Kate Millet -que me lo leeré este verano- y al ir a buscarlo como no echar un ojo por entre sus estanterías y no caer en llevarme algún libro más.
Y yo que leo y veo todo lo que tenga que ver con la excepcional mujer que os siento como no comprarme una de las últimas biografías que ha salido de Marie Curie de Sarah Dry.
Marie (1867-1934) no solo fue la primera mujer en ganar el Premio Nobel, sino también la primera persona en ganarlo en dos ocasiones:
- En 1903 de Física.
- En 1911 de Química.
Aunque su trabajo fue menospreciado por las instituciones científicas francesas, realizó descubrimientos auténticamente pioneros en el campo de la radioactividad, además de descubrir dos nuevos elementos: el radio y el polonio, éste último su nombre se debe a su país natal, Polonia.
En esta biografía, Sarah Dry nos ofrece un relato de una Curie más dinámica y políticamente comprometida que la imagen tópica generalmente extendida de esta maravillosa mujer.
Además al final se incluye un ensayo de Sabine Seifert sobre Irène Joliot-Curie, la hija menos conocida de Curie, colaboradora suya y también galardonada con el Premio Nobel de Química en el año 1935.
De casi todos las biografías que me he leído sobre la señora Curie, ésta ha sido una de las más densas en cuanto a detalles de su trabajo científico, haciendo hincapié en su vida personal lógicamente porque forma parte de ella pero me ha gustado ese punto de vista, de detallar experimentos o trabajos y no tanto profundizar en una vida personal de la que muchos y muchas han escrito y hablado.
Como siempre que leo sobre ella, se me cae la baba de conocer la vida de esfuerzo y sacrificio que realizó esta mujer, solo por cumplir sus sueños en relación a su trabajo, con los que soñaba en su Polonia natal.
¿Os lo recomendaría? Por favor todo lo que lleve el sello de Marie hay que leerlo.
Muchos besos rinconeros y rinconeras y espero veros dentro de unas horas par recomendaros un documental que rescata y recupera algo imprescindible, la memoria.
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