Thelma y Louise cumplen 30 años.

Un primo cuando vio que compartí por Instagram una foto de la peli que os siento a estas horas del último viernes del mes de este abril que despedimos, me escribió sorprendiéndose. Todos y todas las que me leéis, podéis intuir que el cine es una de mis grandes aficiones, pero me doy cuenta que todavía me queda tanto por ver....

Thelma y Louis, es una de esas películas que nunca había visto, y que desde el año pasado la tenía apuntada en el cuaderno de las pelis. Y por supuesto, ha vivido un viaje con las protagonistas, en donde la amistad, la revelación contra el sistema, los hombres que las van jodiendo el viaje y tirar para adelante sin mirar hacia atrás toma una velocidad de crucero.

Thelma Dickinson, un ama de casa de vida vacía y anodina, está casada con un cretino detestable que la trata como a una niña. Por su parte, Louise Sawyer trabaja como camarera en una cafetería y sueña con que su novio Jimmy, que es músico, se case con ella. Un fin de semana deciden hacer un viaje juntas en el coche de Louise para alejarse de la mortal rutina de sus vidas y de todas sus frustraciones. Sin embargo, su escapada, que prometía ser divertida y sobre todo, liberadora, acaba siendo una experiencia llena de episodios dramáticos.

Me gustó tanto, e impacto todavía más que después de unas semanas de la primera vez que la vi -ya la he visto otra más- siguen sin salirme las palabras. ¿Por qué los hombres no entienden que para que dos mujeres se lo pasen bien no es necesaria su presencia, salvo que éstas lo acepten? ¿Por qué 30 años después del estreno de esta película se sigue  sin entender que el no es no, en cualquier momento y en cualquier situación? ¿Por qué no podemos ser tan malas o delincuentes como ellos?

Son muchas las preguntas que me siguen surgiendo, pero por resaltar algunos aspectos de ella, os diría:

- Ese formato de road movie, con ellas tomando no solo el volante del coche, sino las riendas de sus vidas.

- Susan Sarandon y Geena Davis. La primera por esa fortaleza en donde esconde una gran sensibilidad y un pasado al que se nos abre una pequeña ventana; y la segunda, por esa inocencia en donde descubrimos a una mujer fuerte que solo quiere vivir.

- Su tono tragicómico.

- Esas carreteras norteamericanas en donde suceden tantas historias que se han llevado al cine.

- Ese tono de agresividad.

- El final, donde para mí, lo que prevalece es la libertad.

¿La habéis visto? ¿Qué os parece? Thelma y Louis ha pasado a ser una peli referente en esta década de mis 30 en la que estoy transitando.

Muchos besos rinconeros y rinconeras, y ahora sí que sí, hasta mañana 

:) :) :) :) :)