Que llueva que llueva la virgen de la cueva...

Siempre ha habido una cosa que me llama poderosamente la atención, y es que cuando hay temporales en nuestro país (ya sea de lluvias y nieve o en verano olas de calor), un tercio de los telediarios nacionales van dedicados a recordarnos el frío que hace, la lluvia que cae, la nieve que colapsa ciudades y carreteras...

Pero aunque entiendo la trascendencia de ésto, en serio ¿No hay otras noticias de mayor relevancia que ofrecer a los espectadores?

Si sois de Madrid (aunque creo que casi toda España andamos iguales), os habréis dado cuenta que llevamos prácticamente una semana sin dejar de llover, en donde los más fieles compañeros y compañeras en cualquier trayecto que vayamos a hacer son:

. Un buen calzado.
. Un abrigo con capucha.
- Y un paraguas.

Hombre yo a eso le añado un gorro y taparme mucho la cabeza, porque os lo admito me da mucha rabia y coraje que se mojé el pelo, también debería hacerme medir el nivel de inteligencia para que en plena ola de lluvias decida peinarme todos los días, pero os prometo que es superior a mi, desde que soy muy pequeña la coquetería conmigo misma me puede.

Pensaréis y esta ¿qué quiere, hablarnos de la lluvia?

Por supuesto que no, pero como madrileña de casi 34 años ¿Nadie más que yo se sorprende de que lleve una semana sin parar de llover?

Que la lluvia es buena, no es buenísima, porque nos limpia el ambiente de las ciudades, les da otro color y sabor, otra vida, llena pantanos, que por cierto a principios del pasado otoño tanto preocupaba porque estaban casi en mínimos históricos por la falta de ella. Pero ¿No nos planteamos que algo va mal en el planeta?

¿Cuál es la responsabilidad personal de cada uno en que el tiempo nos de sorpresas inesperadas en momentos del año que no esperamos? ¿Podríamos actuar o hacer otras cosas para dejar un planeta más sano a aquellos y aquellas que vengan detrás de nosotr@s?

Yo personalmente, os diría que sí, podría hacer mucho más, pero muchas veces la vagancia me puede, y para el mundo en el que vivimos no debería haber excusas sino actos encaminados a que el día de mañana la gente pueda disfrutar de un mundo sano, donde los animales no corran peligro de extinción porque hay seres que opinan que la caza es un deporte en vez de lo que realmente es, un crimen...

Y sobre todo el pensar que en el fondo no somos más que unos privilegiad@s, de poder disfrutar del planeta y el mundo en el que vivimos y cuidarlo y protegerlo como una persona más que es dentro de nuestro organigrama.

Así que nada rinconer@s, ya sabéis un buen paraguas, un buen calzado y mucha paciencia ante estos días que a mi en lo que se refiere a la salud no sientan nada bien.

No quería despedir este post sin compartir la foto del niño de Almería que hoy lleva una semana desaparecido, Gabriel.

Muchas veces pasamos por alto detalles que cobran un vital importancia, pequemos de precavid@s y por favor que aparezca ya.

Muchos besos rinconer@s y hasta mañana.