Este miércoles y después de unas semanas de reflexión desde que vi en Netflix los dos documentales relacionados con el 11M y los atentados en las Ramblas de Barcelona, quiero sentarme a compartir con vosotros y vosotras desde el respeto las dudas y contradicciones que me generan. Es cierto que la verdad debe ser conocida pero detrás de los hechos en mi opinión hay morbo, ese que hace que nos peguemos a las imágenes dolorosas y nademos en el dolor ajeno.
Entiendo y comparto el derechos a la información, pero y cuando ésta ¿Se enfrenta a la vida, al dolor o la muerte?
¿Hay datos que de verdad necesitamos saber?
Estoy cansada de esos y esas que dicen que el público merece saber la verdad. Hace unos meses Sonsoles Onega lo dijo en su programa del mediodía en relación a una familia que no quería hablar ni que entrará la prensa en el juicio por el asesinato de un familiar y ella apelo al derecho de la audiencia de conocer la verdad. Pero ¿Y si esa verdad no te compete a ti? ¿Y si esa verdad es dolorosa para otros u otras? ¿Acaso no entra en la cabeza de determinados medios o programas de televisión que esa persona que sufrió era alguien de su familia y no quiere seguir siendo carne de audiencia entre programas?
Los hechos que ocurrieron sinceramente creo que deben ser conocidos y juzgados por un juzgado y el juez a la cabeza. Hay hechos, palabras o actos que al resto de personas no tenemos derecho a saber, porque ahondan en el dolor ajeno. Eso no significa que debamos olvidar lo que sucedió y que existen muchas personas que sufren cada día la perdida atroz de un ser querido, pero lo que no debería ser ético es beneficiarte de ese dolor y sacar dinero al testimonio de gente que sufrió y sigue sufriendo.
Estoy cansada de complots o teorías de la conspiración, la triste verdad es que Madrid y Barcelona sufrieron unos atentados brutales que le costó la vida a personas que lo único que estaban haciendo era vivir sus vidas. Unos asesinos en nombre de un Dios que de existir no debe estar de acuerdo con esos hechos, decidieron hacer daño, causar dolor y muerte a su paso.
Conocer la verdad, sí. Aumentar el morbo que genera dinerito, nunca.
¿Qué opináis? ¿Habéis visto esos documentales?
Un beso rinconeros y rinconeras y poco que añadir en este miércoles. Mañana os veo con teatro, puro, verdadero, absoluto y maravilloso teatro :) :) :) :) :)
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