Todos los meses aprovecho a cobrar para darme el pequeño pero inmenso placer de comprarme algunos libros que tarde o temprano acabarán pasando por mis manos y ojos, porque sí, soy de libro de papel, de ir en el metro con él entre las manos, de no irme a la cama sin leer unas líneas, porque leer me relaja, me da vida...
En el mes de octubre cuando visité la FNAC de Leganés, iba con la intención de solo comprarme el nuevo de Millenium pero una vez más, no cumplí lo que esperaba y me fui con tres libros más que me ilusionaron la cara que no el bolsillo :P
Hoy quiero sentar uno de ellos, que a medida que iba leyendo me iba haciendo entrar en conflicto porque ha ido derribando pensamientos que yo tenía pero que hasta que alguien que ha estado dentro no te los dcuestiona con argumentos y verdad no te los puedes quitar
Y eso que os digo que Siempre han hablado por nosotras de Najat El Hachmi, me hace entrar en conflicto tanto personal como laboral porque trabajo con mujeres y hombres musulmanes, a los cuáles respeto y aprecio muchísimo, pero este libro ha derribado un velo que jamás podré volver a poner
Este pequeño ensayo que trata sobre feminismo a identidad, creo que pocas voces tienen tanta autoridad para hablar sobre ello como Najat el Hachmi. Más allá de su condición de hija de familia musulmana marroquí, su mundo narrativo es un mundo de mujeres.
Con este conocimiento, se ha formado una opinión sobre la que se supone ser feminista hoy.
por eso ha escrito este breve ensayo, para hacer hincapié en la crucial importancia de alcanzar la igualdad entre sexos en todas las culturas y etnias, y nos alerta del peligro de supeditar el feminismo a otras causas.
Un manifiesto valiente y necesario. Una denuncia a las múltiples trampas y formas de discriminación que sufren las mujeres en el Islam.
Y es que todo visto desde las gafas de feminista occidental y habiendo tenido conversaciones con mujeres musulmanas de origen marroquí no ha sido hasta ahora que he tomado verdadera conciencia de lo machista y sectario que es el Islam con las mujeres, poniéndolas en el foco de ser las responsables de provocar y como a través del recato, el rezo y la sumisión al hombre pueden ser mujeres dignas.
Algo que me ha sacado de quicio es, porque nuestras vidas no deberían ser guiadas por ninguna religión, ésta no debería marcar los pasos y vidas de las mujeres, y de este velo -no solo el que cubre el pelo y en otras todo el cuerpo- trata este ensayo que vuelvo a repetir me ha generado conflicto pero que me ha gustado por su brutal sinceridad y honestidad de poner nombres a las cosas, y no dejarnos engañar.
Lo único que me queda es que seáis hombres o mujeres, recomendaros su lectura porque muchos velos caen y la vida se ve desde otro prisma, y ese eterno conflicto en mi vida debo admitiros que me da miedo pero a la par me apasiona porque me hace crecer.
Muchos besos rinconer@s y espero veros mañana con una película que me dejo el corazón literalmente parado :) :) :) :) :)
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