A las decenas de canales de pago que existen en nuestros días relacionados con las series, este fin de semana me voy a centrar en el catálogo impresionante, diverso y de extrema calidad que ofrece Netflix.
Esta semana os comentaba que aproveche el estreno de Las chicas del cable para darme de alta en el canal (por cierto gracias por tantas visitas en ese post), pero desde su alta hay dos series que están marcando o han marcado ya las noches de mi pareja y mías.
Hoy sábado quiero compartir una que aunque me queda muy poco para terminar su primera temporada y disfrutar del reciente estreno de la segunda, no me invalida para hablaros de la sorpresa que me lleve cuando comencé a ver Sense8.
La trama gira alrededor de ocho desconocidos que tienen en común haber nacido el mismo día, 8 de agosto en diferentes partes del mundo que después de experimentar la trágica muerte de una mujer a través de visiones se encuentran conectados mental y emocionalmente.
A través de ella son capaces de comunicarse, sentirse y compartir su conocimientos, idiomas y habilidades, que en cada uno de ellos y ellas es alucinante.
De las cosas que más me ha gustado de la serie es el reparto internacional, teniendo la suerte en España de que podemos ver a Miguel Ángel Silvestre además en un papel muy completo y alejado de lo que habíamos visto de él, y unos escenarios igualmente internacionales, donde la interrelación es la base donde gira toda la trama.
Aunque es una serie estéticamente cuidada, hermosa y delicada pero también es de ley decir que hay a ratos que me confunde y no entiendo el porqué ni el cómo de determinadas escenas y diálogos.
Pero de las cosas que más me gustan son algunos de los temas centrales que trabaja sin tabúes ni censuras:
- La política.
- La identidad.
- La sexualidad.
- El género.
- La religión.
- La sin razón.
- La deshumanización.
- Las drogas.
Y así un sin fin de temas que la verdad hacen de ver la serie ya no solo una aventura en la que debo tener los cinco sentidos en pleno funcionamiento sino que me hace pensar, reflexionar y sobre todo tener ganas de mas.
Como os he comentado todavía andamos viendo la primera temporada y de momento lo que he visto a pesar de mis líos mentales me ha gustado y enganchado.
Que inteligente es Netflix de ofrecer un catálogo increíblemente extenso, diverso, para todos los públicos y géneros, haciendo de él un canal de calidad, además de un precio bastante bueno porque por 8 euros al mes podemos disfrutar de todo su catálogo en dos dispositivos diferentes. Hombre también es verdad que hay poder permitírselo, pero la verdad es que si de algo sirve las letras de esta rinconera, merece mucho la pena inscribirse en él.
¿Habéis visto Sense8? ¿La entendéis? ¿Le encontráis sentido a todas sus tramas y personajes?
Yo ahí sigo viendo y disfrutando sobre todo y aunque sea repetitiva de un reparto muy internacional que está muy bien preparado para dejarnos clavados en los sofás de casa.
¿Qué tal va vuestro fin de semana?
Yo en nada unas horitas voy con mami a disfrutar de su regalo de cumpleaños al Teatro Español, así que el lunes os contaré que tal Una habitación propia, que a priori tiene todos los ingredientes para que llamé mi atención:
- Clara Sanchis.
- Un monólogo de Virginia Woolf.
- El tema central del que trata es de cuando las mujeres británicas tuvieron acceso al voto.
Muchísimos besos y mañana otra serie, que había leído y oído mucho de ella pero nada como la experiencia propia para conocer de primera mano, quien es Hannah Baker.
:) :) :) :) :)
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