Conocer para derribar etiquetas y no juzgar.

Hay una habilidad social importantísima que casi siempre que oigo conversaciones por la calle o programas de televisión y radio casi todo el mundo tiene en la boca, la empatía... pero ¿De verás todo el mundo sabemos lo que es y sabemos como ponerla en práctica?

Lo que se viene a decir que "es ponerse en los zapatos del otro/a sin que esto nos cause dolor".

En este principio de primera semana de junio me quiero sentar con vosotr@s para compartir un tema que a mi me asquea, indigna y enferma, y es como tendemos a meter a tod@s en el mismo saco, y en especial a la población inmigrante.

Yo alucinó cuando oigo a gente decir "Nos quitan el trabajo", "Muchos de ellos son unos borrachos", "Ellas son unas frescas", "Van a venir a atentar contra nosotr@s"....

Creo que antes de nada debería comenzar a ser sincera y reconocer que en algún momento yo he pensado así pero después de unos meses de mucho contacto y trabajo con población inmigrante, nada más lejano de la realidad.

Esta gente no viene a quitarnos nada porque no nos pertenece, los trabajos hay que ganárselos, también sería de hipócritas decir que hay personas inmigrantes que cobran verdaderas miserias por su trabajo, pero eso es culpa del inmigrante que acepta esas condiciones por necesidad económica porque no nos engañemos nadie deja su país, sus raíces y familia por amor al arte, o de la persona o personas que ofrecen ese salario y desprecian a tod@s l@s trabajadores. ¿Quién es realmente el culpable?

Lo que vemos en la foto no es ni más ni menos que una mochila, pero en el caso de inmigrantes, ésta viene cargada de factores como:

- Dejar a tu familia e hij@s que quieres.

- El miedo a lo nuevo ¿Qué te vas a encontrar? ¿Te irán las cosas bien? ¿Sabrás desenvolverte en tu nuevo entorno?

- Las deudas que contraes para venirte aquí, porque el dinero de los pasajes para nuestro país procede de algún sitio o que creemos ¿Qué se lo regalan? Y en muchos casos ese dinero se devuelve con intereses de hasta el 80% por eso la premura de encontrar trabajo.

- Enfrentarse a estereotipos y racismo. Pero aquí debería resaltar que son bidireccionales, tanto por parte de españoles como parte de los propios inmigrantes.

Y así sumaríamos un montón de factores que hace que la carga, el paso y la tristeza que conlleva esa mochila en muchos casos sea inaguantable, para que encima haya gente que hablé sin conocer, que diga cosas sin comprobar y que juzgue sin fundamentos.

Creo que dejar a las personas que quieres a distancias enormes y encima sin saber con seguridad en qué momento o cuándo volverás a verlos en los suficientemente cruel como para que haya gente que hable y juzgue tan a la ligera.

Con eso digo que todos los inmigrantes son unas joyas??? Ni muchísimo menos, pero acaso, ¿Todos/as los/as españoles somos estupendos, solidarios, simpáticos, buena gente y agradecid@s?

El ser humanos no solo es blanco o negro, hay una gama de ensaladas que no debemos perder porque sino nos perdemos lo más importante que existe, la persona.

Por eso cuando juzgues el camino de alguien trata de ponerse en sus zapatos, y verás como ni son tan caros y brillan tanto como parecen, porque posiblemente dentro estén lleno de cartones para evitar el frío.

No caigamos en etiquetas o estereotipos absurdos que solo se basan en falsas creencias o verdaderas pero no en todos, sino en algun@s, conozcamos, veamos, vayamos más allá.

Estas reflexiones no son más que fruto de un trabajo que ya va camino de nueve meses, en los que me he encontrado personas de todo tipo, pero por encima de todo personas con sus defectos y sus virtudes.

Besos rinconer@s y hasta mañana :) :) :) :) :)