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lunes, 14 de julio de 2014

¿Cómo olvidar ese primer beso que hizo temblar mi cuerpo y hacerme sentir el vacio? Y sólo han pasado siete años

Dicen que el primer beso de amor no se olvida, yo no olvido el primer beso que me dieron , ni el primer beso por el que sentí amor, pero sobretodo no me puedo olvidar de ese primer beso que me hizo sentir el vacío, uno tan grande que parece que te vas a caer de un precipicio y del que a pesar de estar sobre tierra firme lo sigo sintiendo cada día desde hace siete años.


Y eso que hasta que llegó ese beso paso mucho tiempo, muchos amores que eran ranas, distancia física, diferentes amistades, hasta que un día me senté conmigo misma y analicé que esos nervios, que esas mariposas que yo sentía en el estómago no eran las que se siente por un amigo, sino por alguien que te gusta.

Y si os soy sincera por alguien del que estaba irremediablemente enamorada.

Y de ese instante, de ese roce de su boca con mi oreja y esas palabras "que guapa estás hoy" hoy, hace siete años.

Siete años de muchas cosas: de viajes, de risas, de lloros, de peleas, de reconciliaciones, de convivencia, de amor, de pasión, de sexo, de química, de comilonas, de piscineo, de playeo, de cines, de teatros, de fútbol, de baloncesto, de estudio, de aprendizaje vital, de cambios radicales y de trabajo, de enfermedades, de malos momentos.... pero sobretodo de buenos e increíbles momentos.


Siete años en los que por encima de todo han estado las ganas, la voluntad y el amor de seguir hacia adelante pero juntos... fueron muy duros los comienzos de mi enfermedad y como hasta llegar al día de hoy en el que me encuentro muchísimo mejor, mi chico ha sido un apoyo constante y un bastón en el que apoyarme en el sentido amplio de la palabra porque ha llegado momentos en los que no podía ni andar o me desmayaba de los dolores y él siempre ha estado ahí con una palabra bonita y con un gesto de cariño... y su hombro para cogerme fuerte y hacerme sentir que todo iba a pasar.

Son muchas más cosas las que siento por él, pero lo único que os puedo decir es que me encanta su mirada recién despertado; sus carcajadas con gritito; su barbita de cuatro días sin afeitarse; lo bien que le sienta el uniforme de trabajo; lo trabajador y responsable que es con el oficio que nos da de comer; como disfruta viendo Los Goonies; su cara de sorpresa cuando hago alguna locurilla por él; su timidez a la hora de pedir algo en público, como disfruta de las pequeñas cosas de la vida y como me hace partícipe de ellas, como trata a mi abuela con cariño y respeto, la relación que tiene con la gente que quiero que a su vez es también gente que sabe que le quiere a él, y no por mi sino por como es él...

Sólo se que hoy es un día bonito, porque hace siete años que aterrizó en mi vida y mi corazón, mis tripas, mi alma y todo mi cuerpo quieren que sean para siempre, porque muchas veces lo he dicho aquí con él la pequeña Natalia que un día fui cumplió su sueño de encontrar a ese príncipe que la rescatará.... pero en el fondo creo que nos hemos rescatado mutuamente.

Así que gracias David por hacerme cada día sentir ese vacío porque solo tú eres el paracaídas que yo quiero para agarrarme y juntos sentir ese vértigo que me produce el roce de tu cuerpo, tus miradas y tus palabras, te quiero.

Deciros que nunca pensé que el amor fuera algo tan diverso porque te puede hacer pasar momentos muy malos, momentos muy buenos; pero éstos si son al lado de una persona que te quiere y tú a él es todo mucho más bonito.

Solo deseo que los que estáis leyendo este espacio tengáis la suerte de vivirlo como yo porque como dicen en Moulin Rouge: "Lo más bonito que te puede pasar en la vida es amar y ser correspondido".


Y solo despedirme con una canción que pertenece a la serie de Pulseras Rojas que a David y a mi nos encanta... y es que sin él mi vida no sería la misma :) Hasta mañana




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