Echar la vista atrás en mi vida televisiva siempre va a estar asociado a esta malagueña que derribó muchas puertas con trabajo, esfuerzo y constante espíritu de renovación, siempre teniendo en cuenta que podría interesar al público, desde el respeto.
En una época en la que las mujeres éramos un mero elemento decorativo al lado del hombre que presentaba, ella se adueño no solo de las mañanas de las cadenas de televisión en las que trabajo, sino de los fines de semana con programas de entretenimiento o presentando los informativos de Telecinco de primera hora de la mañana.
María Teresa se adueñó del término "maruja" para ridiculizar a aquellos y aquellas que lo usaban como un insulto, haciéndolos ver su cara más machista y nauseabunda.
María Teresa fue pionera en hacer programas donde dar espacio a:
- Los sucesos.
- Las "mesas camillas".
- La política con aquellas tertulias donde María Antonia Iglesias decía la famosa frase: Entones es puta o no es puta usted.
- Dando espacio a la cultura, teniendo secciones semanales de estrenos de cine o festivales, donde hablar de cine en general y español, en particular.
- Micro teatros en directo.
Una mujer que siempre puso su nombre a las cosas. Cuando en este país la violencia de género se niega, ella le ponía nombre y le daba la importancia que tiene que seamos agredidas en cualquier ámbito de nuestra vida. Y siempre le puso nombre a la violencia que ejercen sobre nosotras, violencia de género.
Una mujer que demostraba rigor y respeto en una entrevista tanto a un presidente del Gobierno que al último o última expulsada de un reality.
Una mujer que nos enseño que la edad solo es una cifra, porque ha estado trabajando con la máxima exigencia hasta hace unos años cuando se retiro o la retiraron, porque el público siempre la fue fiel.
Si echo la vista atrás, esa inquietud política me vino de aquellas tertulias en donde ella sentaba personas de todas las ideologías para dialogar e intercambiar opiniones desde el respeto al otro u otra.
Asocio muchas mañanas de mi vida a verla en la pantalla y hasta os diría soñar trabajar con ella haciendo una sección sobre cultura, a la que ella perteneció y que tanto le deben a una malagueña internacional que llevaba su tierra por bandera.
Mujer que recibió muchos premios, pero que siempre en cualquier formato y en cualquier cadena, ha contado con los y las espectadoras que la veíamos.
Desde este rincón solo mostrar mi respeto a esta mujer, su trabajo y su familia porque paga muchas y muchos era La Campos, pero para sus hijas, su madre. Que la te sea leve Teresa.
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