El pasado mes de abril cuando cumplí 34 años, mi madre que me conoce de miedo, sabe que uno de los mejores regalos que se me puede hacer, es un libro, por lo que ella que conocía lo mucho que me flipo el libro de la serie, decidió regalarme una de las últimas novelas de Atwood, Por último, el corazón.
Una novela que me ha costado coger pero que una vez comencé a leérmela, intuí lo que finalmente me pasó, que caí en ella y me la leí y leí hasta que la terminé.
Víctimas de una debacle , Stan y Charmain se instalan en el coche tras perder su casa. Malviven gracias a los escasos ingresos que ella consigue en un bar de poca monta. Es entonces cuando llama su atención un anuncio acerca del Proyecto Positrón, un experimento social en el que los habitantes de la idílica ciudad de Consiliencia se dividen en dos grupos que alternan su modus vivndi cada treinta días: mientras el cincuenta por ciento se recluye en el Penitenciaria Positrón, para mantener el sistema, la otra mitad disfruta de plena libertad y lleva un estilo de vida propio de la clase media.
Al cabo de un mes, intercambian sus roles: los libres ingresan en prisión y los encarcelados se instalan en las viviendas que ocupaban los nuevos reclusos, haciendo uso común de todos los objetos, enseres y aparatos. Agotado el entusiasmo inicial, Stan y Charmain no tardan en percatarse de que Consiliencia no es el paraíso que habían imaginado y pronto se ven envueltos en una serie de aventuras disparatadas, atrapados en un torbellino de lujuria que les hará cuestionarse sus valores y sentimientos más profundos.
La novela gira en torno a un fenómeno de tan desgraciada actualidad como es la desaparición de la clase media, aunque también hace hincapié en los entresijos de la pareja moderna, desvelando de forma inquietante su intimidad, sus crisis, sus demonios, sus fantasmas...
Os debo admitir que al leer la sinopsis me dio miedo leérmelo porque me recordó en cierta medida a la película El Experiemento (por supuesto la alemana), pero nada más ajeno a la realidad.
El libro nos muestra como los protagonistas encuentran una vía de salvación a la situación de extrema pobreza ala que se ven sometidos por la caída del sistema y ven en esa oferta un futuro, incierto, pero ¿Acaso su futuro en el coche no es incierto?
Una historia que te atrapa y te sientes con la necesidad de seguir leyendo, aunque si os debo ser sincera ha habido momentos en lo que me estaba leyendo me parecía bastante irreal, pero el mundo en el que vivimos no es en muchas ocasiones más dantesco que las películas o los libros???
Esa mezcla de sexo, lujuria, futuro, perdida del poder adquisitivo, amor, negocio cruel me ha gustado, para ser sincera me ha gustado mucho, aunque como os decía ha habido momentos de no entender muy bien lo que estaba leyendo.
En fin ¿Os lo recomendaría? Pues sin dudarlo, porque Atwood, siempre es una buena opción, porque sus novelas resultan ser terriblemente reales y nos hace pensar que quizás no estamos tan lejanos en acabar como ella nos comenta en sus novelas.
Hasta mañana y me despido con una pregunta ¿Alguna recomendación literaria que hacerme?
:) :) :) :) :)
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