Hace unos años la directora Marina Seresesky, me encandilo con su ópera prima, La puerta abierta, una película llena de sentimientos, emociones y puertas que quizás se abran, pero os engañaría y sería muy falsa si su nueva película que vi en Netflix hace unas semanas, Lo nunca visto, es de las peores que he visto.
Una película que no cuenta como Teresa ve apagarse Fuentejuela de Arriba, la pequeña aldea de la montaña donde ha vivido toda su vida.
Pero el pueblo recibe una visita inesperada en medio de la nieve aparece un desubicado grupo de africanos... cuya llegada conmociona la aldea. Teresa lo tiene claro: huidos de una situación de explotación a la que habían llegado engañados, los africanos quieren quedarse en España como sea... y esa puede ser la solución a la falta de habitantes en el pueblo.
Con ayuda de sus amigos Jaime y "El Guiri" decide ocultarlos y armar un plan. Poniendo patas arriba prejuicios y expectativas, los recién llegados y los habitantes locales trabajarán juntos para que su hogar continúe existiendo.
No me gusto desde el minuto 1 que aparecen los africanos y africana y vi que tanto su trato como vestimenta era un claro ejemplo de estereotipos que tenemos en la cabeza sobre como deben ser, actuar, hablar, comportarse o vestir personas de raza negra.
Un total despropósito de diálogos, chistes sin humor y actuaciones banales que hacen del drama del racismo y la España vacía un sainete de mal gusto.
Todas y cada una de las críticas que había leído sobre ella me marcaban el paso, pero ya sabéis nada como ver para tener una propia opinión, así que ni hago la pregunta no os la recomiendo porque es un absoluto horror.
Eso sí, lo que os voy a volver a recomendar es un libro que me leí hace casi un año que me hizo reflexionar y cambiar, Ser mujer negra en España, leerlo y aprendamos que una sola canción o palabra conlleva más racismo que un insulto.
Muchos besos rinconer@s y mañana nos vemos con más y mejor que esta horripilante película
:) :) :) :) :)
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