Totalmente inmersa en la trilogía de Ana Gª Bernal y Lady Desidia: Los hombres de Federico

Si hay de una cosa de la que me siento realmente orgullosa es de mi relación de pareja. Una relación que me suma, acompaña, hace feliz, hace sentir en casa y familia, me hace sentir casi 17 años después de ese primer beso en la discoteca Fabrik, amor. Una relación en la que no hay obligación de estar juntos, lo estamos porque nos queremos, respetamos, ponemos...

Y es que tengo una pareja que sin motivo o aniversario, lleva unos meses llenando mi vida de libros que cree que me van a gustar. Libros comprados pensando en mí y reforzando mis aficiones.

La segunda parte que os siento este lunes, es la segunda parte de la trilogía de Anais Gª Bernal y Lady Desidia, Los hombres de Federico. Un libro al que lanzarte sin control, leer desde la pausa y sobre todo del absoluto disfrute.

"Un año después, las mujeres de Federico se reúnen de nuevo en La Huerta de San Vicente ante la llamada de Novia, pero ellas ya no son las mismas y el entorno también ha cambiado por un paisaje sombrío y bañado en rojo. El encuentro se complicará cuando las protagonistas descubran que Gª Lorca creó un manuscrito sobre sus nuevas vidas que dejo una puerta abierta a que otros personajes se adueñen de la historia. Las mujeres se darán cuenta de que algo no va bien cuando ocurran situaciones extrañas en la casa y su angustia irán en aumento con los rumores de que los hombres de Federico (las antiguas parejas o amantes de ellas) quieren llegar hasta un lugar con propósitos desconocidos. Solo la magia y mantenerse juntos podrá ayudarlos o enfrentarse a la incertidumbre y a los peligros que les depara esa imprevista llegada".

Un libro mucho más intenso.

Un libro mucho mas oscuro.

Un libro con mucha más magia.

Un libro con mucha más iconografía lorquiana.

Un libro más poético.

Un libro con Federico como protagonista, antagonista y miembro activo de unas historias que salieron de sus manos e imaginación. Con personajes tanto femeninos como masculinos que él fabricó. Un libro que nos pone en el centro la sororidad femenina, el no juzgar y el tener en cuenta que o vamos juntas o no podemos conseguir nada.

Una frase con la que se termina y la historia y que me hizo que me emocionará hasta llorar: Te espero Federico, mamá no te olvida.

Espero durante este 2024 me terminaré esta trilogía y tener presente que os la sentaré más veces porque siempre practico el recuperar historias que hayan pasado por mis manos, porque siento emociones diferentes y observo cosas que antes no había visto en otra lectura.

Un beso enorme, como decía la primera parte de la trilogía, Federico vive. 

¿Nos vemos mañana? :) :) :) :) :)