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sábado, 13 de junio de 2020

El desgarro fue tal que saltó por la televisión a nuestro corazones: Hécuba

No me cansó de hacer y hacerme la siguiente pregunta ¿Qué habría sido del confinamiento y la desescalada sin una película que ver o un libro entre las manos?

Me respondo, algo totalmente dantesco, pero han habido teatros como os dije hace unas semanas que han ofrecido en abierto sus obras de teatro, para que las pudiéramos disfrutar desde casa.

Así que claro, yo que siempre he dicho en este rincón, que soy una total admiradora de Concha Velasco, la actriz que creo que más veces he visto sobre unas tablas ¿Cómo no ver el drama griego del que ella es la total y absoluta protagonista?


Se abre con un espacio desolador: el campo después de la batalla. La derrota de unos sirve de paso para la victoria de los otros. Nos movemos entre despojos, no entre los seres humanos... Esos seres que vemos deambular a la orilla del mar son las mujeres prisioneras, cautivas y aniquiladas, enloquecidas e inermes, que recorren las ruinas de lo que fue su vida, buscando no se sabe qué...

 
Hécuba camina entre cadáveres, entre los cadáveres de sus hijos... Una vez asumida la derrota, las pérdidas irreparables, solo lo queda esperar bañada en dolor... Tanto es así que cuenta la leyenda, Hécuba estremeció a los propios dioses con su sufrimiento, hasta tal punto que lo convirtieron en un perro aullando su dolor durante la eternidad. Y eso es Hécuba: un aullido, un llanto interminable, perpetuo e inmortal.


Nada se puede comparar a la magia del teatro:

- Estar sentada o sentado en tu butaca
- Los avisos de "quedan cinco minutos" notificando que la función va a comenzar
- Esa oscuridad previa al espectáculo
- La cuarta pared entre el reparto y el público
- Esas cosquillas de ver como el tiempo pasa muy rápido, y cuando una obra te ha dejado con la boca abierta parece que ha durado cinco minutos
- Esa sensación de quemazón de manos cuando aplaudes y aplaudes el buen momento que has vivido dentro del teatro

Pero oye, poder ver a Doña Concha desde el salón de mi casa ha sido toda una experiencia, y una vez más ratificó que esta señora es una bestia parda del teatro, da igual a que personaje se enfrente o a quien de vida, ella misma es vida, es luz, es verdad, es magia...


En palabras de Juan Mayorga: "Hécuba es, con más derecho que cualquier otra jamás escrita, la tragedia de la venganza, a diferencia de Hamlet, Hécuba es la más vengadora y no vacilará, erigiéndose en un tiempo acusador , juez y verdugo.

Un enrome personaje que nació en un palacio, esposa de rey, madre de hombres llamados a ser reyes, que solo espera la hora de ser arrastrada como esclava hacia tierra extranjera, y que paradoja, cuando parecía más débil, esa madre desdichada se revuelve y devuelve el golpe tan irreparable como aquel que ella ha recibido".


Además si cuenta con:

- Una escenografía que te hace sentir dentro de la historia
- Una música que para corazones y parte almas
- Voces maravillosas
- Esos cortinajes traseros que es como una nueva puerta hacia el futuro
- Un reparto equilibrado desde el o la que habla más a ella, Concha

La verdad es que fue una pasada verla, en casa nos gustó mucho, así que no se si todavía seguirá para verse, de ser así no lo dudéis e ir a sufrirla/disfrutarla. Y de no estar disfrutar de todo el teatro que nos están regalando de forma totalmente gratuita, porque ésto se acaba pronto.

Muchos besos rinconeros y rinconeras y mañana nos vemos con otra pedazo de mujer

:) :) :) :) :)


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