Para mi gran sorpresa puesto que este año ya se había estrenado la segunda temporada, en agosto y en plenísima ola de calor donde el ventilador de mi salón tenía mucho más calor que yo de las revoluciones que llevaba, se estrenó la tercera y dicen será la última temporada de la serie española de Netflix: Altamar.
En el trailer que es la única sinopsis que se hizo pública, vemos como Nicolás Vázquez hace una llamada de socorro. Por otro lado, un espía inglés avisa a Eva Villanueva de que un pasajero del barco tiene en su poder un peligroso virus; ella y su hermana Carolina tendrán que pararle los pies.
Pero no serán las únicas que busquen a este sospechoso personaje ya que el Capitán Santiago Aguirre pide al doctor Ayala para resolver el caso.
Con bastantes menos capítulos que las anteriores temporadas, vemos más de lo mismo:
- Muchas intrigas dentro del barco, tanto en el pasaje como los empleados y empleadas.
- Hermanas valientes capaces de enfrentarse a cualquier cosa, incluido un virus maligno.
- Hombres con poder que lo ostentan, pero en ocasiones no saben que hacer con él.
- El sexo siempre es un buen ingrediente para conseguir algún objetivo.
- Muchos paseos en tacones de arriba hacia abajo y viceversa, generando ese ruido diminuto y muy perceptible de que alguien te vigila.
Una temporada rápida pero que no aporta mucho, ni del barco ni de las hermanas, salvo que el personaje de Carol que parece frágil y débil, en mi opinión es la más fuerte y con carácter dentro del Bárbara de Braganza, y eso que luchar contra el personaje valiente e intrépido de Ivana Baquero es complicado, pero las dos se empastan muy bien y hacen un dúo interpretativo creíble.
En relación al virus, pues poco que decir, salvo que si habéis visto como yo las dos anteriores temporadas, no dejéis pasar la oportunidad de ver ésta porque según he leído y aunque se dijera que habría una cuarta temporada, con esta se da por finalizada las aventuras dentro de ese barco, que sin decir quién es, os diré que se despide con una triste muerte.
Yo hoy os debo confesar que he comenzado la semana con los ánimos un poco más altos, con nuevos objetivos en mente y con la sensación y la idea de que algo bueno está por venir, lo notó, lo siento y sobre todo me lo merezco.
Muchos besos rinconeros y rinconeras y espero veros mañana con una película increíble de Montxo Armendariz.
:) :) :) :) :)
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