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jueves, 16 de agosto de 2018

Vaya vida, vaya arte, vaya estilo, vaya Frida....

Como dice el refrán más vale tarde nunca, y aunque yo conocía muy de pasada la vida y obra de Doña Frida Kahlo, no ha sido hasta hace más o menos un año cuando decidí leer, ver y estudiar un poco más sobre la figura de esta señora tan fracturada por dentro pero con tanta magia y tanta arte que explotaba hacia afuera.

En una de mis últimas visitas a la FNAC de Callao de Madrid, mis ojos de forma irremediable se fueron a las memorias que sobre ella ha escrito Rauda Jamis.


La autora descubre la increíble vida de Frida, una mujer extraordinaria, de arrolladora personalidad y de gran belleza, pintora y esposa del mayor pinto mexicano de la época, Diego  Rivera.


Su vida fue una sucesión de amor, dolor, sufrimiento, arte y política.

Amante de León Trotsky y admirada por figuras como Picasso, Breton, Duchamp, Kandinsky y todos los intelectuales del momento, Frida y su obra triunfaron en el París prebélico de 1939 y en Nueva York, donde fue reconocida como una de las grandes pintoras mexicanas de todos los tiempos.


Su vida está marcada por el sufrimiento. Inválida, postrada en una cama de por vida, utilizó su pintura para expresar su dolor, sus angustias y su pena. Un terrible accidente, a los 16 años, le destrozó la columna vertebral, obligándola a llevar durante toda su vida nos dolorosos corsés de y eso que la torturada.

Ella utilizaba la pintura para exorcizar su dolor y el talento transformaba el exorcismo el obras de arte.


Sobre todo Frida Kahlo fue una señora que padeció grandes dolores:

* Del cuerpo, debido al terrible accidente que tuvo cuando era una niña, y del que nunca se llegó a recuperar del todo y del quizás fue lo que la movió a pintar.
* Del alma, porque no puedo aguantar tanta carga de dolor físico, mental y sentimental.
* Del corazón, porque su amor con Diego Rivera fe algo que casi la hace enloquecer, a pesar de ella conocía con quien se había casado, eso no quito que la dejará de dolor la multitud de deslealtades, y eso que ella también las tuvo con él.

Todo el dolor plasmado en cada pincelada de su obra, traspasando los sentimientos y el alma de quien lo ve, pero cuando lees o descubres cosas de su vida, entiendes el porqué de esos colores, de ese dolor, de ese desgarro artístico.


Con su obra y muerte se creó una de las imágenes más icónicas del mundo de la moda, recurriendo a su cara y colores para hacer los tejidos y las ropas más llamativas, y haciendo de ella alguien muy popular, pero detrás de esta bella estética mexicana había una mujer magnífica de gran carácter y grandes convicciones políticas, lo que la llevó a ser luchadora y fiel.

Vamos que por lo que intuiréis el libro me ha fascinado de principio a fin, porque entre las historias que conforman su vida se va alternando escritos de puño y letra de esta gran charrita, por eso creo y afirmo que todo libro que encuentre de ella terminará en mis manos, y si depende de este post la traeré muchas veces porque ha sido una de las grandes figuras del arte del siglo XX.


No me queda otra que recomendaros ya no solo este libro sino todo aquel que toque y trate a esta gran señora.

Un besazo rinconer@s y espero veros mañana con más :) :) :) :) :)


YO TE CREO HERMANA

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