Tenía muchas ganas de que llegará este miércoles para compartir las mujeres que ocuparán este post. Y antes de nada dar las gracias al Espacio de Igualdad María Zambrano por darme el sitio para descubrir a mujeres tan desconocidas para mi y al Espacio Lucía Sánchez Saornil, por invitarme a través de una tarde a tener más interés en ellas.
¿Conocíais a Mujeres Libres?
Lo primero que resaltaría de Mujeres Libres, que fue una asociación de mujeres valientes, pioneras y revolucionarias que palparon el analfabetismo que había en nuestro país y como en mucha mayor medida afectaba a las mujeres, viéndose más perjudicadas y faltándolas herramientas y habilidades para desenvolverse en una sociedad donde los cambios eran muy rápidos.
Mujeres Libre según leí en un artículo del Diario Público en internet, que fueron las anarquistas que revolucionaron la clase obrera, una clase que las necesitaba pero que luego no las dejaba espacios públicos donde poder exponer sus ideas y necesidades solo por su género.
A finales de la II República unas 21.000 mujeres anarquistas se agruparon de forma simultánea y sin saberlo en Madrid y Barcelona, formando el primer movimiento feminista radical de auténtica base popular en España.
Fue uno de los grupos precursores de reivindicaciones por la liberación de género que, tantos años después, siguen estando muy presentes.
Algunas de las mujeres que formaron parte de él fueron: Lucía Sánchez Saornil, Carmen Conde, Amparo Puig i Gascón...
Una trabajo que transformó las relaciones personales y el concepto de familia y de mujer en esa sociedad. Pero la llegada de la Dictadura las dio carpetazo y las llevo practicamente al olvido, por lo menos para mi que no tenía ni idea de su existencia.
Fueron además pioneras en conectar el socialismo utópico, con el republicanismo, las librepensadoras y las obreras internacionalistas.
Pero también Mujeres Libres fue un proyecto dual conformado por:
- La agrupación no mixta, es decir solo compuesta por mujeres.
- Una revista.
Para ser sincera primero vino la revista que nació en mayo de 1936 con la intención de convertirse en una herramienta de análisis y debate en torno a la emancipación de la mujer desde una perspectiva anarquista.
Sin embargo, su realidad se vino abajo como os he dicho antes con el estallido de la guerra; el tiempo de las palabras había llegado a su fin, era hora de la acción, así que en septiembre de 1936 se fundó Mujeres Libres como una federación autónoma a nivel nacional, configurándose como no mixta. ¿Por qué no mixta? Los espacios políticos y sindicales de esos años se veían copados por hombres, relegando a las mujeres.
Tanto la revista como la organización, se planteó su trabajo desde tres ejes:
1. La esclavitud de las mujeres por ignorancia.
2. Por el hecho de ser mujer.
3. Su función productora en el sistema capitalista.
Para esta tarea partieron de la idea de que había que capacitar a sus afiliadas, que en su gran mayoría eran obreras con un bajo nivel de estudios; si bien la situación de la guerra dejo a las mujeres en retaguardia, lo que determinó mucho su camino.
Con los claros objetivos de captación y capacitación, establecieron varios programas educativos:
- Erradicación del analfabetismo.
- Programas para incorporar a las mujeres a la fuerza laboral como trabajadoras cualificadas con un salario digno.
- Programas educativos sobre desarrollo y cuidado infantil.
- Programas para refugiados que ofrecían asilo y escuela.
- Servicios y asistencia a combatientes tanto en el frente de batalla como en los hospitales,
A esto le añadimos que muchas de ellas cogieron un arma para ir a defender la República de aquellos que se habían alzado contra ésta.
Defendían la idea de que las mujeres no solo eran madres, formando un sistema que proveía de cuidados de atención infantil para mujeres que estuvieran sirviendo como delegadas de la unión, lo que sirvió para que su unión fuera todavía más fuerte.
Al acabar la Guerra Civil muchas de ellas se fueron al exilio, pero la que se quedaron conocieron la represión o el silencio. Algunas formaron parte de la organización clandestina Unión de Mujeres Demócratas, que estuvo vigente hasta 1953 y que tuvo como función ayuda a los presos, también realizando actividades contra el régimen franquista y servir de encuentro y discusión entre las mujeres.
En ellas habían debates tan interesantes como las dos corrientes de pensamiento anarquista acerca de la naturaleza de las relaciones hombre-mujer y de lo que significaba la igualdad.
Una consideraba que las mujeres eran reproductoras y su trabajo fuera de casa era secundario al de los hombres, así lo que hacía falta era una revolución del trabajo de una mujer en el hogar; pero la la otra corriente insistía en que las mujeres eran iguales a los hombres y que la clave para su emancipación estaba en su incorporación al trabajo asalariado en términos idénticos a los hombres.
Mujeres fuertes, valientes, empoderadas y con una fuerza que ni la Dictadura aparcó sus ansías de libertad.
Cuando las descubrí me recorrieron muchas emociones el cuerpo:
- Pena de no conocerlas.
- Rabia del silencio en torno a movimientos o mujeres relevantes.
- Alegría porque ese taller solo fue la primera piedra de muchas lecturas y visiones sobre este grupo de mujeres.
Y tres cosas para finalizar este espacio que lleva ocupándome desde hace más de tres meses de búsquedas:
- El libro que habla de ellas, y que seguramente este 2021 siente por aquí.
- El enlace a youtube sobre el documental de estas mujeres, para que lo podáis ver y aprender como yo las que queráis saber un poco más y este post solo haya sido el aperitivo.
- En unos meses tendremos sentada a una de sus fundadoras, Lucía Sánchez Saornil.
Muchos besos rinconeros y rinconeras y por muchos más post donde sacar de la invisibilidad a mujeres magníficas.
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