Sin motivo aparente, Cora Fannetti, una mujer joven que está en un lago con su marido y su hijo, apuñala a un extraño hasta matarlo. En su declaración dice no saber por qué lo ha hecho. Un policía comienza a investigar y se obsesiona con descubrir el motivo oculto de la mujer. Juntos harán un viaje desgarrador hacia las profundidades de su psique para desentrañar los secretos escondidos en su pasado.
Dicen que hay un momento, una canción, una palabra... que hace que a una persona le haga un click en la cabeza y no sepa como va a reaccionar porque hay algo ahí dentro, que parece tener aparcado pero que le daña enormemente con una fuerza tan fuerte como un ciclón.
Muy sencilla en términos de misterio, no existe ningún tropiezo en ella, porque se disfruta, asombra y entristece la verdad, además de inesperada es muy dolorosa, tanto como la reacción de Cora en una tranquila tarde de pantano con tu hijo delante, como cuando se sabe la verdad.
Y es que la serie comienza de forma abrupta y poco a poco se van desentrañando los misterios que terminan siendo una necesidad vital, porque tanto el presente como el pasado y sobre todo el futuro dependen de ello.
¿Por qué me sorprendió?
Porque no me esperaba ni esperaba nada de ella, y capítulo a capítulo a través de la intensa mirada de Jessica Biel y un tremendo Bill Pullman nos hacen ir llegando a empatizar con una asesina.
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No todas las grandes series pueden tener grandes publicidades (por lo menos en España) pero os aseguro que ésta me dejo clavada en la silla, cama o sofá -distintos sitios donde la he visto- con el corazón latiendo fuerte de tristeza, dolor y algo muy importante, esperanza.
¿Os la recomendaría? ¿Lo dudáis? Además mañana me siento a compartir la segunda temporada de esta torturada historia.
Y por hoy prometo no volver más por este rincón...Hasta mañana :) :) :) :) :)
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