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martes, 2 de mayo de 2017

De vez en cuando hay que perderse, para ver quien te busca

Si me habéis leído con anterioridad sabréis que desde hace unas tres semanas llevó arrastrando un brote bastante fuerte de la espondilitis que padezco, que al principio estaba adosado en los tendones de Aquiles y a medida del paso de los días y para mi desagradable sorpresa en vez de ir remitiendo va en aumento, subiendo hacia las piernas, los huesos sacros y hasta el brazo derecho.

Pero no, hoy no me siento para hablaros de él, porque la verdad sería un espacio doloroso, sino para remarcar que es en momentos como éstos cuando te das cuenta a quien le importas quien te quiere y sobre todo quien se preocupa de ti.


Otra de las grandes sorpresas que me lleve fue la aceptación y la cantidad de visitas que tuvo el post que escribí acerca del momento físico que estoy viviendo (Con B de brote), en el primer día superó las 150 visitas, lo cuál me dejo de piedra, y que a día de hoy sobrepasa la doscientas y pico. A ellos le siguió una cantidad de mensajes, correos y muestras de afecto varias que me han llegado a través de publicarlo por aquí. A todos y todas muchas gracias, porque aunque el post de ese día estaba escrito por si podía servir a alguien que estuviera pasando por lo mismo y porque no decirlo aliviarme, recibir tanto cariño me ha ido alegrando el paso de los días.

Pero sobre todo lo que me están sirviendo estas semanas es para saber quién se preocupa por mi y quien no. Y la verdad no me he llevado grandes decepciones ni desilusiones (aunque alguna sí, para mi sorpresa), porque quien esperaba ha estado y está y quien no lo esperaba tampoco se ha hecho notar, así que también muchas gracias por no ser fals@sy no hacer algo que no os salía.

Como dice el post de hoy es bueno perderse en alguna ocasión para saber y quien te busca, y en este caso quien se preocupa, quien te llama y quien te escribe aunque solo sea para decirte "estoy aquí, necesitas algo".

Y aquí si quiero poner nombres propios aunque son algun@s porque se lo merecen y están haciendo de estas semanas algo más llevadero, gracias a:

- Mi madre, porque aunque estos días están resultando horrorosos, sin ella, su compañía y sus regañinas todo sería mucho más difícil. Nadie como ella para saber poner las cosas en su sitio y relativizar.

Aunque se que quizás ella lo está pasando peor que yo, porque la noto impotente de no poder hacer nada, pero si supiera que verla cada mañana es un revulsivo y hace que coja energías y ganas para afrontar los días y que andar no sea el ejercicio más atroz.

- Mi chico, que como siempre con cariño, dulzura y a momentos dureza está siendo mis pies para andar y mi bastón para sujetarme. Porque no es lo que hace por mi sino el cómo lo hace, con distancia, con respeto, con precaución pero siendo enérgico en que no éste bache no me coma la moral.

- A mi familia, que anda pendiente de mi, sin agobiarme pero sintiendo que los tengo cerca. Por cierto María, mi niña te quiero más de lo que te pueda decir con palabras.

- A mis amigas y voy a poner tres nombres propios porque quiero y me da la gana: Lorena, Nuria e Irene, porque de forma muy sutil y cariñosa andan pendientes de cómo ya no solo estoy físicamente sino mentalmente. Os debo admitir que creo que esta es la primera vez que digo en voz alta y sin prejuicios que me siento mal, porque me cuesta horrores, siempre me encierro y no dejo que nadie entre en esa búrbuja.

Pero es tan bueno saber que cuando vas a marcar un número, la otra persona te va a contestar y simplemente te va a escuchar.

- A mi cuñada (a mi cuñado también por supuesto), pero es que ella con sus mensajes y las fotos de mi sobri me está alegrando los días y las noches después de salir de trabajar.

- A mis compis del curro, que me están tratando como una reina y no dejan que haga nada que me pueda hacer daño. Es un gusto compartir trabajo y vida con ellas.

En general a mucha gente pero es que éstas en particular quería dejarlo por aquí en este rincón, porque de verdad que en estos momentos en los que ando en la salud más perdida que Mogli en la selva, sus palabras y compañía alivian más que unos medicamentos.

Gracias por las visitas, gracias por los comentarios tanto buenos como malos porque hacen que cada día que me siente en este rincón y escriba lo haga con responsabilidad y habiendo leído y releído mil veces los post que en ocasiones dadas las ansías publicó con faltas, gracias por decírmelo.

Y antes de despedirme un mensaje para mi espondilitis


Besos rinconer@ y hasta mañana, donde adelantaré un día el espacio del teatro, pasando a los miércoles, pero es que el jueves es un día especial que quiero compartir por aquí.

:) :) :) :) :)

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