Cada noche, Angela, una joven reportera de una televisión local, sigue con su cámara a un grupo profesional distinto. Esta noche le toca entrevistar a los bomberos y tiene la secreta esperanza de poder asistir en directo a un impactante incendio. Pero la noche transcurre tranquilamente. Y cuando, por sin, reciben la llamada de una anciana que se ha quedado encerrada en su casa, no le queda otro remedio que seguirlos durante la misión de rescate. En el edificio donde vive la anciana, los vecinos están muy asustados. La mujer, encerrada en su piso, lanza unos gritos desgarradores... Es sólo el comienzo de una larga pesadilla y de un dramático reportaje único en el mundo.
¿Qué hay detrás de cada puerta de ese horrible y sangriento edificio?
¿Qué le pasa a la gente dentro del edificio?
¿Las cámaras conseguirán captar cada imagen y descubrir al exterior la realidad que sucede allí dentro?
Es una película total y absolutamente brillante, donde la sorpresa, el grito o el giro no falta, la tensión se palpa y el sudor en la frente y por la colimna no falta en ningún segundo, haciendo de ella un perpetuo terror y sangre a borbotones.
Y sí, me encantó Manuela Velasco y esa intrépida reportera pero el grito que en un momento dado de la peli, me provocó todavía a día de hoy hace que me duela la garganta.
¿La habéis visto? ¿Os la recomendaría? Si is gusta como a mi el grito y los sustos -quién me ha visto y quién me ve-, por supuesto, verla porque os va a sorprender, y si ya la habíais visto, volver a verla, porque seguro que se os escaparon detalles dignos de volver a verle.
Muchos besos rinconeros y rinconeras y espero veros mañana con mis propuestas de cine para este fin de semana.
:) :) :) :) :)
No hay comentarios:
Publicar un comentario