"El consentimiento se ha convertido en un concepto clave en las relaciones sexuales. De entrada, parece claro y perfectamente perimetrado. Pero ¿Es realmente así?
Este texto reflexiona sobre los matices, las fisuras y las paradojas que lo acompañan ¿Se puede verbalizar el deseo con absoluta claridad, sin ambigüedad alguna?
La autora explora el camino recorrido entre el no es no y solo sí es sí, desde las perspectivas filosóficas, históricas y políticas y, a contracorriente del discurso dominante, defiende no dejar de lado el primero en beneficio del segundo".
No es ninguna sorpresa si me leéis, que Clara Serra ha estado sentada más de una vez, hace mucho tiempo que la sigo en sus andaduras. Hace unos años cuando iba de número dos de Iñigo Errejón en Madrid la fui a ver a varios mítines. Y, sinceramente creo que es una de las personas que ha dejado la política con más dignidad, porque cuando ya no confías en el proyecto ¿Qué haces allí?
Cuando la vi a través de sus redes sociales que sacaba este breve ensayo, sabía que me lo leería. Y siento disentir con ella en muchos aspectos, porque en lo relativo a la prostitución soy abiertamente abolicionista. Creo en lo que ella habla del deseo, pero creo -al igual que ella- que debería haber más educación sexual en las aulas desde edades tempranas, para no llegar a los años en los que no sepas lo que es el deseo, el consentimiento y las relaciones sexuales tenidas bajo pactos en los que las palabras: no y sí, toman importancia.
Siempre es bueno tener a Clara entre las manos, aprender, disentir y cuestionarme con ella, y aunque ha habido fragmentos en los que disiento, creo que pasado un tiempo prudencial, lo volveré a coger, a leer y quien sabe lo que opinaré en esa nueva lectura, porque sino se que voy a comer mañana, como se lo que pensaré u opinaré dentro de unos años.
Un beso fuerte y poner a Clara en vuestras manos. ¿Nos vemos esta tarde/noche con otro ensayo maravilloso?
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