Powered By Blogger

miércoles, 12 de enero de 2022

Madrid: ciudad no apta para personas con alguna discapacidad

Hace como unos 10 años estuve subiendo una serie de post sobre barreras arquitectónicas o sitios donde la accesibilidad no era factible para las distintas capacidades de las personas que habitamos la ciudad de Madrid -un cajero a más de 1,50 m de altura, aceras intransitables...-. La verdad es que no recuerdo porque los deje de escribir, pero la propia experiencia es lo que te hace despertar, y desde que hace casi un año mi madre perdió casi en su totalidad la visión debido a sus problemas de azúcar. Cuando salimos en estas nuevas circunstancias a la calle la incomodidad se agrava ante el estado y la concepción de la capital.

- Aceras levantadas, con socabones, baldosas levantadas o rotas... Muchas de ellas producto del pasado Filomena, pero en otros casos llevan así años y años. En avenida de Institución Libre de Enseñanza a la altura del 28/30 no tropezarte es más una suerte que algo derivado de la falta de visión de mi madre.

- Semáforos donde no suena el pitido que marca a las personas que o no ven o tienen poca visión para poder cruzar. Si a estos semáforos muchas veces le mezclamos que cuando suena el pitido que marca que se pueda cruzar hay un ámbar para que los coches puedan pasar, el peligro es más que evidente, porque hay conductores y conductoras que viven como si estuvieran en el Rally Dakar.

- Aceras y suelos llenos de mierda, porque no se en vuestros barrios pero aquí en Ciudad Lineal hace meses que no veo a un barrendero o barrendera. En verano hay tanta basura, hojas o rastrojos que ha habido momentos de pasar algo de inquietud de que como hubiera un pequeño incendio, iba a salir el edificio en llamas.

- El exceso de terrazas que ha quitado espacio para andar y para que personas con movilidad reducida puedan moverse con un mínimo de espacio entre mesas y sillas. Entiendo que todos y todas debemos trabajar y comer, pero hay límites que se están traspasando que son intolerables.

- Los patinetes que en muchos casos son un descontrol porque los usuarios o usuarias los dejan tirados en mitad de la calle, o como hace unas semanas me lo encontré en mitad de la entrada a una estación de metro.

- Pasos de peatones donde los niveles para cruzar no son tales, haciendo que los tránsitos en silla de ruedas o personas como mi madre que prácticamente no ven sea un peligro.

- Calles poco iluminadas y no porque no haya semáforos sino porque o no se paga la luz o no se cambian las bombillas.

Si a todo esto le sumamos una arquitectura poco accesible, hacen que la vida en Madrid para muchos y muchas sea casi imposible. Las ciudades las habitamos muchas personas y entre ellas una cantidad alta que tienen capacidades diversas y, todos y todas nos merecemos poder pasear por nuestras calles sin que esto implique un peligro. Puedo entender el gasto que esto genera, pero entonces ¿Los impuestos a dónde van?

Esto que es cuento es mi día a día en Ciudad Lineal pero en otros barrios de la capital están igual o en peor estado de abandono. Y de verdad me indigna porque no veo voluntad ni planes de poder solucionar estas trabas para personas que de por sí pueden tener dificultades añadidas.

Muchos besos rinconeros y rinconeras y espero poder veros cuando vuelva del trabajo con los y las ganadoras de la atípica no Gala de los Globos de Oro de la pasada madrugada del lunes.



No hay comentarios:

Publicar un comentario