Hola he vuelto :p con un domingo de pelis más que malas, peores

Holaaa!!! hasta este año siempre que había cerrado este rincón por vacaciones sentía la necesidad de ir metiéndome en él, en cambio estos días he desconectado de todo y todos y todas. 

Primero, porque necesitaba olvidar mi vida en Madrid.

Segundo, necesitaba pasar tiempo con mi pareja, disfrutar de su compañía, de sus abrazos, sus sonrisas, sus conversaciones, de sus oídos escuchando muchas veces las mismas canciones vitales que le meto. Un tiempo para él y para mí.

Tercero, porque en ese viaje pretendía dejar todos mis malos rollos, paranoias, tristezas y dolores del alma, y aunque ando con ayuda externa para todo esto, poner distancia de tu vida siempre viene muy bien.

Cuarto, porque el mar siempre me ha curado casi todo, sentir las olas que van y vienen y con ellas se van esas lágrimas de más que has derramado o las angustias que has sentido. En ese momento como dice mi chico solo te dedicas a entrar y salir de la playa con un mínimo de elegancia, por lo que todas las angustias quedan aparcadas.

Quinto, porque me las merecía que narices.

Han sido unos días de sentarme en la silla de mi pequeña terraza del apartamento en el que estábamos y ver el mar en el horizonte, no pensar en nada y si algo me cruzaba por la cabeza mirar lo que podría ir bien, no siempre estar con la negatividad por delante. Días donde he asumido que los años han pasado por mí, y el Sol que antes me encantaba ahora me agobia y, si me tengo que poner morena me pongo pero sin excesos absurdos de Sol en la piel.

Días donde pensar en el septiembre que se avecina volver a la vida, y que esto sea una alegría pero también un agobio por el tiempo parada, con miedos pero con ganas y fuerzas renovadas.

En definitiva que han sido pocos pero buenísimos días donde seguir recolectando momentos y sitios con mi chico en un sitio tan especial como ha sido Nerja en mi infancia y juventud, que tantos buenos recuerdos me trae siempre al corazón y la cabeza.

Pero como todo, siempre hay que volver a la vida, y este domingo quiero ser un poco "pájaro de mal agüero" porque os quiero sentar dos de las últimas películas que he visto, y que no han sido malas, sino peores.

Todos y todas las que crecimos en los 90 vemos esta peli en la cartelera, y a mí, personalmente me evocaba a momentos muy felices de mi infancia. A una infancia que ahora se denominaría pre adolescencia, donde me encantaba una pelota de baloncesto, las pistas del Parque de los Mosquitos -en Ciudad Lineal- disfrutando de cada acorde de esa música que tantos años después la bailó como el primer día, hasta la llevó en la carpeta de Spotify de mis favoritas.

También en esos años ¿A quién no le gustaba Michael Jordan? Aunque yo fuera más de Dennis Rodman.

Pero los tiempos cambian, los años pasan, y en esta nueva era de juntar a jugadores de alto nivel del baloncesto con Los Looney Tunes, le han llegado los avances tecnológicos y con ellos a mi me pareció que se perdía la esencia del formato.

La crítica la destrozaba, pero como dice el refrán: las comparaciones son odiosas, pero es que lo siento la película es:

- Mala,

- Lenta,

- Sin sentido, 

- Con un Lebron James sin emoción, ni chicha ni limona. 

- Con un baloncesto camuflado entre filigranas y efectos digitales.

Vamos que con perdón, la peli no la salva ni Piolín que es mi Looney Tune favorito.

¿La habéis visto? ¿Qué os ha parecido? ¿Os la recomendaría? Pues como sabéis para gustos, los colores, pero es que lo siento, no hay por donde pillarla.

Muchos besos rinconeros y rinconeras y espero veros dentro de un rato con otra peli que ha sido la más mala que he visto en este último año.