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miércoles, 18 de enero de 2023

El lodo puede que no sea solo de barro

"Una fuerte sequía castiga las vastas extensiones de arrozales en el Levante español. Ricardo, un prestigioso biólogo, después de viajar por todo el mundo, tiene la oportunidad de volver a sus raíces para cumplir una misión, proteger el paraje natural donde vivía de niño. Las medidas que debe tomar le enfrentarán radicalmente a los lugareños, que ven atacada su forma de vida y subsistencia, un enfrentamiento que tendrá consecuencias inesperadas". 

La película que os siento este miércoles la vi hace un mes y pico, pero el trabajo, el cansancio y andar con la cabeza en otras cosas me hizo dejarla pasar por alto, hasta hace unos días que cuando la volví a ver en Filmin, pensé: ostras no he escrito de ella en el blog..

El lodo no es una película amable desde que empieza hasta ese salvaje y acuoso final donde todo parece que va a ser el final, y la angustia se mezcla con esa abundante lluvia en la que parece que todos y todas se han dejado llevar sin pensar ni medir.

LO MEJOR DE ELLA:

- Cada historia detrás de la necesidad de que no se malgasta agua.

- ¿Trabajo u obsesión?

- El reparto, y como siempre recalco, Raúl Arévalo que te lo crees delante de una cámara, interpretando al personaje que sea.

- El calor y el dolor palpable.

- Esa Valencia llena de arrozales pero con muy poca y mal aprovechada agua.

- El racismo no es solo con personas de otras razas, etnias o religiones, sino con todo aquel o aquella que venga de fuera de tu provincia.

Aunque la verdad llegó a un punto en el que se me hizo cansina y estaba deseando que algo reventará para ver por donde iba a tirar esa película de claro tinte ecologista.

¿La habéis visto? ¿Os la recomendaría? Sí, porque para gustos los colores, y donde esté Raúl Arévalo estará este rincón. Un beso muy fuerte y espero mañana entre turno y turno subiros un par de post teatrales :) :) :) :) :)


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