- Sorprendente
- Impactante
- Villana
- Desleal
- Envidiosa
- Celosa
- Traicionera
Muchos son los adjetivos que me salen para describir la serie que comencé por casualidad en HBO pero que ha terminado siendo un auténtico vicio, porque ¿Por qué hay alguien con un mínimo de valores en Succession?
Logan Roy es el "rey" de uno de los mayores imperios mediáticos del mundo, que se niega a dar el paso de la sucesión, pero un día enferma...
A través de los vaivenes de la familia Roy, en la que todos y todas te desmontan escena a escena, vamos siendo testigos de las luchas por el poder de una familia totalmente disfuncional, donde el patriarca y perdón por la palabra es un auténtico cabrón.
Pero un cabrón de esos de la ficción que sientes que va a pasar a la historia, porque no se puede ser más cruel y desagradable con tus hijos e hija.
A diferencia de mi añorada Juego de tronos, esta familia va con ropa de firma y helicópteros privados, donde nadie y repito nadie deja de sorprenderte con sus actitudes y actos; y eso que detrás de esa poderosa familia, se esconde una podredumbre nauseabunda.
Unas tramas donde no te dejas de sorprender, casos a parte los finales de su primera y segunda temporada, que por lo menos a mi me dejaron petrificada, es de esos que no esperas y sientes como una bofetada de realidad, que te deja con muchas ganas de más.
Un punto y aparte se merece Brian Cox y un quisquilloso, mimado y frágil Kieran Culkin, que se marca uno de esos papeles que sabes que se van a recordar.
¿La habéis visto?
¿Os la recomendaría? Sin dudarlo un segundo, eso sí os lo podéis permitir, no la veáis a tirones, porque es más vibrante y sorprendente.
¿Dónde verla? HBO
Muchos besos rinconeros y rinconeras y feliz último día del año, aunque mañana despedire con vosotros y vosotras este casi caduco 2019
:) :) :) :) :)
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