"Ángela es una mujer que lleva una vida aparentemente idílica de puertas para afuera: tiene dos hijas fantásticas, un esposo encantador y una casa espectacular. Sin embargo, esta fachada es un fraude y cada vez le cuesta más esfuerzo mantenerla. Ángela es en realidad una mujer maltratada por un marido obsesivo que le ha convencido de que sin él no sería nada. Hasta que un día aparece Edu, un atractivo joven que le desvela sorprendentes secretos y que está dispuesto a ayudarla eliminándolo de su vida".
¿Habéis escuchado alguna vez el término que te hagan luz de gas? Éste viene de una película de Ingrid Bergman, en donde de forma sugerente, el marido la va haciendo creer que está "loca" jugando con las luces de gas de la casa -ya de paso aprovecho para recomendárosla-.
Y de ahí el término que te hagan luz de gas, es decir te hacen quedar como majara en situaciones que tú estás siendo testigo. Una forma de violencia muy sutil, pero dañina y perjudicial para quienes la padecen, porque terminan dudando hasta de su propio nombre.
- De la nada te van aislando, pero siempre es que tu propia voluntad.
- De la nada, eres tonta o algo torpe.
- De la nada se te olvidan cosas o palabras que sabes que habías escuchado.
Y así como quien no quiere la cosa de forma imperceptible llega el tortazo, pellizco, puñetazo o paliza que te enseña que de loca no tenías nada, porque todo lo de antes era la punta de un iceberg de violencia que vamos viendo de forma muy bien reflejada con el paso de os capítulos. Nada es lo que parece, siempre eres la mala, no vales para otra cosa que no sea la casa y hasta para eso eres censurada porque lo haces bien.
LO MEJOR DE LA SERIE:
- Las ausencias y silencios de Verónica Sánchez en una ficción donde brilla a cada paso que le tratan de quitar la luz a su personaje.
- Daniel Grao, con el que vas desde el respeto, al miedo, al más profundo asco.
- La sorpresa del final del primer episodio donde ves que nada es lo que parece.
- Un guion que sabe jugar a la sorpresa en cada momento, haciendo que seguir viéndola sea una necesidad.
- Esas playas vascas que conforman la inmensidad y soledad de las mujeres maltratadas.
Una serie que remueve y que desde este rincón, os invito a ver en Netflix, donde está cosechando muchas visualizaciones. Os veo esta tarde/noche con otra ficción del sello rojo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario