No solo duelen los golpes en el Teatro del Barrio

Hace ya algún tiempo mi amiga Irene me aconsejó un monólogo de una señora llamada Pamela Valenciano, la cuál hace un ejercicio de poner su vida y los calvarios que la hizo pasar una relación de pareja con un maltratador al servicio de todos aquellos y aquellas que a través de este formato han destapado el fenómeno de la violencia machista como algo cotidiano que está en nuestras vidas tan naturalizada que nos impide identificarlo.

Ahora el teatro del Barrio nos regala tres días para poder disfrutar de este monólogo en el cuál Pamela Valenciano narra la vivencia personal de la autora en su primera relación de noviazgo. Una relación que se tornó violenta con el paso de los seis años que duró. Se podría decir que en este monólogo -personal- la autora nos va contando la historia universal de las violencias machistas y la construcción de estereotipos que generan la desigualdad que permite ejercer la violencia sobre ora persona, en todos los niveles.

Partiendo de sí misma, de su propia experiencia, y a través del humor, del drama e interactuando con el público, la actriz consigue tocar la vida personal del público y generar conciencia y preguntas.

Este proyecto empezó siendo una exposición fotográfica, evolucionó a un taller de prevención de violencia para institutos y ahora se presenta como un monólogo.

Esta evolución ha tenido que ver con el deseo de la autora de dar respuesta tanto a la violencia que vivió como a los procesos de sanación que se derivaron. Y en el teatro encontró la forma de catarsis colectivo más auténtica.

Gracias a esta monologuista muchos y muchas han descubierto los horrores que conlleva una de las peores lacras mundiales, la violencia de género. Por desgracia en España hay muchas que la padecen y sufren y creo que iniciativas como ésta hacen un favor muy grande a la sociedad y al mundo en el que vivimos. Por desgracia Pamela lo sufrió pero gracias a su labor tanto en el Teatro del Barrio como en sus charlas en diferentes locales o claustros de universidades esta lacra se sigue visibilizando y ojala llegué el día en que le pongamos fin y sobre todo justicia.

¿Os la recomendaría? Pues sin lugar a dudas porque lo veo una oportunidad única de poder disfrutar de este monólogo, además que yo me he quedado en las puerta lo menos ya tres veces, así que rinconer@s ¿Nos vemos en el teatro?

Un beso gigantesco y hasta mañana :) :) :) :) :)