Y como ¨casi¨ siempre mi madre tiene razón...
Hoy 12 de febrero, es el día de la amistad, es decir de aquella familia que vas formando, que va tomando fuerza e importancia en tu vida con la que pasas tantos momentos que son imposibles de describir....
En una semana en la que los escaparates de las tiendas se van a llenar de corazones quiero sentarme a dar las gracias a esos pocos pero increíbles amig@s que me acompañan en ese viaje que es la vida.
No nos vamos a engañar muchas veces pasan por nuestras personas que creemos serán para toda la vida, pero por circunstancias, por el tiempo o la vida que va más deprisa que nuestra cabeza, esas personas van pasando por tu vida y van dejando en ella poso, porque aunque no estén han formado en algún momento parte de tu ser y han dejado parte de ellos o ellas en ti.
Pero no hoy me quiero parar en aquellos que se quedan, que están, que te demuestran con un simple mano en el hombro que están a tu lado en los días de risas y bailes pero también en los que tienes que decir adiós a una de las personas más importantes de tu vida.
Como os comenté hace casi un mes mi yaya partió de nuestras vidas a un sitio en el que dicen que ha dejado de sufrir y en el que deseo esté ya de la mano de ese hombre que la quería tanto, mi yayo.
Pero no solo fue en ese día sino en el mes previo que tan mal lo estaba pasando cuando esa familia elegida me ha demostrado que está a mi lado, para escucharme llorar hasta casi que se me secarán los ojos.
Fue un mes muy difícil, unas Navidades en las que el tic tac del reloj iba sin freno y en el que la cabeza sabía que iba a pasar, el corazón no estaba preparado y esas amigas han estado conmigo sabiendo respetar mis silencios, mis aislamientos, pero lo que es más importante dejarme su hombro y su oreja para poder compartir ese dolor que estaba viviendo.
Y es que al fin de al cabo eso es la verdadera amistad, la que está ahí siempre que la necesitas da igual el dónde, el cómo y el cuándo, porque sabes que vas a descolgar el teléfono y esa otra persona va a estar ahí. A las de siempre, y a las que se van añadiendo poco a poco formando, eso, familia.
Gracias porque con mis rarezas y mis separaciones para tomar aire, respirar y estar sola sabéis estar a mi lado, quererme, respetarme y acompañarme en cada calle que va cogiendo mi vida.
Feliz día familia, os quiero más de lo que las palabras saben mostrar :) :) :) :) :)
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