En el mes de mayo en una visita relámpago a Segovia, probé por primera vez esa sopa que llevaba mi madre 31 años intentando que la comiera y la verdad es que yo me negaba por el hecho de que llevará pan, pero madre mía de mi vida lo que me estaba perdiendo, no comiendo Sopa Castellana.
He querido dejar para este domingo y con estos fríos la receta de este fácil plato, pero riquísimo, que por cierto ya he probado el de mi madre y ME ENCANTO!!!! como todo lo que ella cocina.
INGREDIENTES:
- 10 dientes de ajo.
- 6 huevos (1 por persona):
- 12 rebanadas de pan duro.
- 150 gr de jamón serrano.
- 2 litros y medio de caldo de carne.
- Sal y pimienta al gusto.
- 2 cucharadas de pimentón dulce.
- 50 ml de aceite de oliva virgen extra.
PREPARACIÓN:
1. Pelamos y fileteamos los ajos, no es necesario que sean muy finos. El ajo debe dar olor a también proporcionar la emulsión entre el agua y el aceite para que la sopa sea excelente.
2. Elegimos una cazuela grande, calentamos el aceite en el fondo e introducimos el ajo. Salteamos hasta que comiencen a coger un color dorado y añadimos también el jamón cortado en trozos pequeños. Removemos con una cuchara de madera hasta juntar bien los sabores.
3. Cuando los ajos tengan un color de miel tostado añadimos 6 rebanadas de pan duro y les damos unas vueltas. Retiramos la cazuela del fuego, y espolvoreamos con el pimentón dulce. El pimentón cumple una doble función: colorea de rojo el pan y además proporciona aroma. Es importante hacerlo con la cazuela fuera del fuego para evitar que el pimentón se queme.
4. Removemos todo bien y que se junte el aceite con los ajos, el jamón, el pan duro y el pimentón. Volvemos a colocar a hervir durante el proceso de cocción. Rehogamos todo durante 2-3 minutos más y sin dejar de remover agregamos el caldo de carne. Si no hay caldo se puede hacer con agua. Cocemos a fuego moderado durante unos 20 minutos, en ese tiempo no hace falta remover la sopa.
5. Pasados los 20 minutos añadimos el resto de pan, las otras 6 rebanadas que previamente hemos tostado con un poco de aceite de oliva. Colocamos en la superficie y los dejamos flotar hasta que se ablanden. Añadimos sal y pimienta negra recién molida.
6. Servimos los huevos y leos echamos a la sopa. Dejamos cuajar durante 2-3 minutos.
7. Servimos super caliente en un cuenco o si tenemos en cazuelas de barro (que es lo propio, aunque si es plato hondo tampoco pasa nada).
Pues con este sabor a ajo que yo adoro me despido de vosotr@s pero solo hasta mañana, porque aunque en Madrid es fiesta yo me sentaré por este rincón, además que me voy al teatro....... :)
Besos rinconer@s y hasta mañana :) :) :) :) :)
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