Triste aniversario

En este mes de mayo, de calorcito, pequeñas tormentas, alergias, y fiestas de San Isidro en Madrid, también es el terrible y triste aniversario de la muerte de la chica madrileña, Sandra Palo.

Hace algún tiempo escribí sobre este caso y sobre la admiración profunda que tengo a su familia, gente luchadora que trabaja para que las cosas mejoren y que por una vez se cambie la maldita ley del menor.

Ayer, 17 de mayo, hizo 8 años de su brutal y antihumano asesinato, y hoy quería recordarlo porque no debemos olvidarnos de esta chica nunca, siempre en mi memoria recuerdo la primera vez que vi a su madre en un programa de televisión, estaba recuperando poco a poco el habla que había perdido al enterarse de lo que le habían hecho a su hija, me sigo emocionando cuando veo su foto en la tele y de verdad pido muchas veces por su familia, para que puedan seguir adelante con su vida y su lucha que es la de todos.

Todos debemos hacernos responsables de cosas que suceden en nuestro país y una de ella es la ineficaz ley del menor, una ley que no protege a las víctimas sino que protege a los asesinos, y esto es una sociedad en la que yo no quiero vivir, deber seguir protestando, mandando cartas, yendo a manifestaciones que convoca la familia para que esta ley sea reformada y que por lo menos las familias afectadas puedan tener algo tan simple como justicia.

¿Es normal que unos menores que hacen tal acto macabro, salgan a la calle y su expediente quede limpio??? Limpio sí, su expediente queda como si nunca hubieran hecho nada, es que esta ley o los que la promulgaron no se acordaron de la víctima y de su familia que sufre la impotencia de que legalmente no se puede hacer nada?????

Pienso que a pocos programas va esta familia y que su lucha debe ser la de todos, todos debemos ser responsables de la sociedad en la que vivimos e intentar pensar que las cosas tienen y deben cambiar.

Desde este pequeño rincón quiero mandarle a la familia el beso y abrazo más sincero, mi cariño, todo mi respeto y hacerles saber que no están solos tiene una gran cantidad de gente que luchamos porque las cosas cambien y por fin la justicia sea justa. Y María del Mar, la madre decirte que te admiró, te respeto y que en mi corazón siempre hay un sitio especial para ti y tu familia, porque a pesar de no haberte visto en mi vida, siento que eres una mujer muy grande y siento orgullo de que haya una señora que siempre esté luchando incansablemente porque gracias a vosotros, las cosas podrán cambiar.

Descansa en paz Sandra.