Lorca siempre, en cualquier formato, en cualquier lugar: La pasión de Yerma.

 ¿Dónde? Teatros del Canal.

¿Hasta cuándo? 18 de julio.

¿Cuál es su reparto? María León, Jorge Monje, Mari Paz Sayago, Lucía Espín y Diego Garrido.

"Quiero beber agua y no hay vaso ni agua; quiero subir al monte y no tengo pies; quiero bordar mis enaguas y no encuentro los hilos". Juan: "Lo que pasa es que no eres una mujer verdadera y buscas la ruina de un hombre sin voluntad".

En La pasión de Yerma se vuelve a profundizar en los conflictos que ya apuntaba Lorca, adentrándonos en la tensión entre deseo y moralidad, maternidad y muerte, género y poder, pero se hace desde la libertad que ofrece una visión contemporánea.

Del mismo modo que la maternidad es no entendida a día de hoy como en el siglo pasado, en esta nueva versión del clásico nos planteamos los diferentes motivos que pueden llevar a estos personajes a desencadenar la tragedia porque, como ya demostró en su día García Lorca, ni la honra más firme es capaz de sujetar sus pasiones.

El tema principal es el instinto frente a la represión, ya que Yerma lucha porque su instinto le dice que debe ser madre, pero no lo logra. Por un lado, a través de un gesto radical, se libera de la esterilidad de Juan, aunque no de su tragedia personal. Por otra parte, la determinación de Yerma de matar a Juan obedece en parte a su deseo de cumplir con una función impuesta por la sociedad; quiere tener hijos como las mujeres casadas que viven a su alrededor, pero al no tenerlos se libera de la carga matando a su marido.

Lorca fue muy consciente del éxito de los dramas rurales del teatro, por eso elabora sus tragedias -Yerma, Bodas de sangre y La casa de Bernarda Alba- basándose en una conjugación de mito, poesía y sustancia real, tratando de retratar a una mujer a su vez oprimida y segura de sí misma.

A la trilogía lorquiana, le faltó una cuarta, Las hijas de Loth, aunque por desgracia Federico jamás llegó a escribirla.

En esta nueva versión que tiene en la dirección a Pepa Gamboa, se nos adentra en la tensión entre deseo y moralidad, maternidad y muerte, género y poder desde la libertad que ofrece una visión contemporánea.

Si a todo lo anterior, le sumamos que a Yerma le da vida María León, son razones más que suficientes para seguir apostando por la cultura.

Muchos besos rinconeros y rinconeras y os veo mañana con un nuevo y por lo que se no está avisando un caluroso viernes.

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