De la mano de Federico

Justo hoy en el aniversario del asesinato a mano de los fascistas de Federico Gª Lorca, quiero compartiros un libro que trata de:

- La importancia de la obra de Federico en la vida de Lluis Pasqual.

- Los temas de sus obras, que también son temas vitales para Luis.

Un libro corto, emocionante y que con él, pretendo rendir un pequeño homenaje a uno de los referentes de la literatura mundial. Un hombre al que asesinaron, pero que tantas décadas después sigue muy vivo, cada vez que le leemos, nombramos o vemos algunas de sus obras. Porque sí, a Federico lo mataron, ¿Quién o quiénes? ¿Quiénes fueron la manos ejecutoras? Sus nombres no importan pero Federico les sobrevivió y eso debe molestar a quienes pensaron que mientras mataban su cuerpo, matarían su obra.

"Al igual que cuando uno se enamora por primera vez se está enamorando de alguien y del amor al mismo tiempo, Gª Lorca era para mí el autor y la literatura: el descubrimiento de la compañía espiritual y de la capacidad de aventuras que encierra un libro. 

Aunque leía a otros autores, la sensación de extraña cercanía, en algún momento debí de sentir que si una puede elegir a sus amigos entre los vivos, también la puede hacer entre los muertos sí, como en este caso, sus palabras, que albergan sus emociones más íntimas, te acompañan y te sirven, en algunos momentos de a vida, para darle un nombre a los tuyos. Enamorarse del Federico amigo era demasiado fácil y, sobre todo, peligroso.

Me he enamorado de otros escritores pero, en algunos casos, con el tiempo ha llegado el desamor, les he dejado yo o me han abandonado ellos. La fascinación que desde el primer momento sentí -y sigo sintiendo- por la escritura de Gª Lorca me decía que Federico podría acompañarme por lo menos un largo espacio de mi vida, alimentando durante mucho tiempo la cálida sensación de fraternidad que me producía su lectura: amor de hermano.

Ahí estaba. Esto iba a ser, mi hermano. Y puestos a pedir, mi gemelo. Un espejo al que poder mirarme, un reflejo en forma de refugio, mucho más sabio que yo por el hecho de ser, poeta, y cuyos pensamientos y emociones se parecían a las mías, o más bien los míos encontraban su libre expresión e la manera como él los contaba".

Un viaje increíble con Federico como motor. Así que nada más, que recomendároslo y por favor sigamos nombrándolo y leyéndolo, porque como nos escribe Anais Bernal: Federico vive.

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