"Con el punto de partida de la agresión sexual que sufre una joven en los Sanfermines del 2016 por parte de cinco hombres que se autodenominan: La Manada. Poco a poco la película va entretejiendo esta y dos historias más y arrojando luz sobre la violencia sexual que viven las mujeres a diario hasta llegar al #Metoo español; momento en el que un millón de mujeres y jóvenes toman las calles al grito de: Hermana, yo si te creo y rompen el silencio en las redes con #Cuéntalo".
Tenía muchas dudas sobre ver el primer documental que os siento este domingo, pero una vez terminado, se que no me equivoque porque estamos ante la justicia visual de un caso que indigno no solo a la sociedad sino a las mujeres que vemos como nuestro testimonio nunca es creído, siempre es cuestionado, y en vez de víctimas somos tratadas como ideólogas de planes malvados en los que los hombres sean perjudicados, olvidando que la verdad solo es una, y la justicia lo corroboro, y quienes están en prisión son esos cinco hombres a los que yo me niego a darles un nombre, porque eso sería darles entidad.
Un documental que hace justicia con la mujer que padeció esa brutal agresión sexual.
Un documental que hace justicia con las personas que trabajaron en el caso.
Un documental que hace justicia con aquellas mujeres que dieron la cara en aquellos momentos donde los medios se preocupaban más del "morbo" del caso y ese nauseabundo abogado defensor que detrás había una chica muy joven.
Un documental que pone en el centro como este caso marcó un antes y un después para muchas, que tomamos o tomaron conciencia de la violencia en la que vivíamos y en que aquella chica podríamos haber asido cualquiera.
Un documental que pone en el centro el consentimiento.
Un documental que pone en relieve la importancia de la educación sexual en las aulas desde edades muy tempranas.
Un documental que nos enseña las caras que importan, las de los victimarios.
Un documental que nos cuenta la historia de otra chica agredida por esos hombres y como la fuerza y voluntad de la chica de Pamplona la hizo seguir hacia adelante.
Un documenta respetuoso, calmado y con esperanza de futuro, porque las mujeres y aquella chica se lo merece, sin juicios porque ella no era la acusada, y con la perspectiva de una vida por delante.
A pesar de mis miedos iniciales, debo admitiros que me emocionó y gustó verlo, porque ese caso como os he comentado marco un antes y un después y no debemos dejar que se retroceda en derechos y en educación.
Si lo habéis visto comentarme que os ha parecido, porque no hago la pregunta, ir a Netflix y verlo. Dentro de unas horas os compartiré el documental que hizo Coixet sobre los abusos sexuales en la escuela de teatro de Lleida.
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