miércoles, 6 de marzo de 2024

Más de 120 días sin fumar

Lo que parecía imposible el pasado verano cuando estaba en una racha de fumar muchísimo, a día de hoy, miércoles 6 de marzo es una realidad, porque hoy hace 138 días que deje de fumar. 

¿Por qué? Bronquitis, bronquitis asmáticas, anginas, constipados, asma... me llevaron a reflexionar sobre que futuro quiero:

- Uno en el que esté todo el rato pegada a un cigarro y poniéndome bien mala cada dos por tres.

- U otro, en el que aunque con mucho esfuerzo y con días complicados pueda ir recuperándome y no depender de que mi estabilidad y nervios dependa de un cigarro.


Una decisión que debo admitiros no ha sido nada fácil porque mi nivel de consumo estaba superando lo que para mi cuerpo era aceptable.

Una decisión de la que de momento a día de hoy no he flojeado, estando en ambientes y con personas que fuman y sin ganas de echarme un cigarro en las manos.

Una decisión que me ha llevado a plantearme mis días porque antes había muchos espacios asociados al tabaco, como por ejemplo de casa al metro o viceversa.

Una decisión que me ha llevado a tomar chicle hasta hacerme daño en la dentadura.

Una decisión que me ha llevado a ver que realmente soy adicta al tabaco, porque lo que empezó como un juego de probar y luego asociarlo a momentos de ocio, me ha terminado acompañando entre épocas de poco y mucho consumo unos 20 años de mi vida. 20 años en los que he pasado por muchas marcas y autoengaños de decirme en voz alta: "buahh, lo dejo cuando quiera". Y que falsedad porque en plena confinamiento y ERTE del anterior trabajo estuve 18 meses sin fumar, o haciéndolo de forma ocasional, pero fue volver al trabajo y fumar, fumar como nunca, hasta llegar a dolerme el pecho.

Y no quiero eso para mí, no me quiero buscar o incitar a una enfermedad pulmonar o incluso un tumor por culpa del tabaco. 

El camino no está siendo fácil, porque ha habido días sobre todo el primer mes y medio en el que he llegado hasta llorar porque me he dado cuenta de lo enganchada que estaba, pero creo que por primera vez en mi vida he tomado conciencia de mi salud, mi cuerpo y que dentro de un mes y once días cumplo 40 años y quiero tener una larga vida. Hace algunos años estaba en pleno tratamiento biológico por la espondilitis y ni ahí deje de fumar, así que creo que esta decisión ha llegado en un buen momento, sin meditarla mucho pero con fuerza y ánimos.


En diciembre como os conté estuve en Granada y mucho de lo disfrutado esos días se debe a que no tenía un cigarro en las manos, esas caminatas, escaleras y cuestas fueron duras pero disfrutadas desde respirar aire puro y no necesitar al maldito cigarro en las manos.

Hasta mis fotos son más bonitas porque no tengo un cigarro en la mano derecha.

También os debo decir que lo llevo con calma y que como todo camino puedes caer, y si pasará no me voy a machacar ni juzgar sin piedad como suelo hacer, porque primero de todo soy humana, pero esta persona que os escribe siente desde la madurez que dan los años y el malestar de los ataques de asma, que el momento esta aquí, no quiero perder esta batalla conmigo misma, me mimo, me cuido, me habló bien y pongo en valor cada día que pasa que no fumo.

Además el dejar el tabaco me está llevando a ahorrar que en un año como el 2024 que está marcado por viajes y cumplir sueños vitales en forma de viajes y conciertos no me está viniendo mal. 


Vamos que en mayo voy destino Nottingham a ver a Take That, mi Take That y la Natalia fumadora no lo habría conseguido.

Así que me voy a dar las gracias a mí misma por demostrarme que si quiero, puedo, y a toda la gente que me está acompañando y me refuerza en mi decisión, en especial a Las coquetas de Chamartín.

Un beso enorme y esper vernos todos y todas mañana en un jueves de teatro :) :) :) :) :)

No hay comentarios:

Publicar un comentario