David, un niño coreano-americano de 7 años, ve cómo a mediados de los años 80 su vida cambia, de la noche a la mañana cuando su padre decide mudarse junto a toda su familia a una zona rural de Arkansas para abrir allí una granja, con el propósito de lograr alcanzar el sueño americano.
Minari llegó hace una semana a la Gala de los Oscar como una de las grandes sorpresas del año, porque no hay formato pequeño o grande, sino historias buenas, bien contadas, bien enseñadas y que nos haga pasar un rato en donde el mayor aprendizaje que yo le sacó es que la familia son lazos muy fuertes, pueden pasar por malos momentos pero siempre deberían estar unidos, como fortaleza para saltar las adversidades.
Una película basada en la vida del director, y en donde poco a poco y a través de esa granja y esa casa portátil vamos viendo su día a día, en donde el padre ha puesto todas sus ilusiones en ese terreno, que cuida, trabaja y mima.
LO QUE MÁS ME HA GUSTADO DE ELLA:
- El niño de la peli, que te hace disfrutar a través de sus miradas y palabras.
- Esa relación que surge entre nieto y abuela. Y esa abuela, que por este papel lleno de luz y ternura ha conseguido un Oscar.
- La luz que alumbra cada escena en contraste con todo el trabajo, sacrificio y esfuerzo que hay detrás.
- Deja de lado los conflictos migratorios y el choque cultural para enseñarnos esa familia desde dentro, en esa particular casa sobre ruedas.
- Un guión que va mostrando sin sobresaltos pero con las angustias diarias que puede vivir una familia, su historia.
- El trabajo de fotografía, que parecen escenas reales y grabadas.
- La sencillez nos regala grandes historias.
Ha sido un año de cine diverso, con historias y repartos de distintas razas, que enriquece el cine porque muestra la sociedad actual. Yo particularmente me canso de siempre ver las mismas caras tanto en cines como en series, por lo que caras nuevas siempre refrescan y nos enseñan el gran futuro del cine.
Y la gran pregunta ¿Qué es un Minari?
También conocido como perejil coreano o berro de Corea o apio de agua, es un ingrediente común en muchos platillos, como el bibimbap o el kimchi. Su sabor es bastante fuerte y se comen también los tallos. Aunque en varias recetas coreanas se usa como condimento, también se prepara en una especie de tortilla hot cake grande, el minari-jeon, que es lo que les voy a enseñar a preparar hoy.
No se si la habéis visto, pero de no ser así, buscarla en las carteleras de vuestras ciudades y disfrutar del buen cine. Y si la habéis visto, comentadme que os ha parecido ¿Vale? Recordar que hay tres vías:
- Comentarios al final del post
- A través del email: detounpoquito@hotmail.es
- En la fanpage: Desde un rincón de mi habitación
Muchos besos rinconeros y rinconeras y espero veros mañana en una nueva semana del mes de mayo.
:) :) :) :) :)
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