Con esta frase comienza el documental con el que quiero comenzar esta nueva semana, con una mujer que hace unos 20 años decidió dar un paso al frente y denunciar al hombre que la tenía acosada, su compañero de partido. Pero también quiero usar este rincón para darla las gracias, porque muchas veces se necesitan a las primeras en dar a cara y recibir todos los golpes para que otras puedan ver que aunque es innegable que el camino es difícil, la verdad siempre gana.
Nevenka nos dio a todas un ejemplo, y nos dejo para el recuerdo su lucha y fuerza en ese cuerpo tan frágil casi a punto de romperse de todo el daño que la había sido infligido y que seguía dándole una sociedad que la cuestionó y puso en duda. Pero ella siguió firme en su intención de que se juzgará al culpable de tal daño.
Muchas gracias Nevenka.
La verdadera historia del primer caso de acoso sexual de España de un escándalo. Nevenka Fernández, su protagonista, habla sobre ello: "Mi negativa provocó su acoso". Se nos enseña a lo largo de los episodios de este documental la historia de una mujer que denunció a un político por acoso sexual cuando no era común denunciar y menos que trascendiera de forma pública.
La dejaron sola. Narró ante un tribunal vejaciones y episodios íntimos. Ganó el juicio, El entonces alcalde de Ponferrada y superior de Nevenka, el popular Ismael Álvarez, que fue condenado y dimitió. Miles de personas se manifestaron tras la condena por las calles de la ciudad para respaldarlo a él y condenarla a ella, que tuvo que salir de España porque nadie le dio trabajo. Y desapareció. 20 años después, Nevenka rompe su silencio en un documental que reconstruye la primera gran sentencia condenatoria por acoso sexual en España. Y tiene mucho que decir.
Una reflexión que en palabras de la directora del documental, Maribel Sánchez-Maroto, paso por la culpa. Pese a la verdad judicial, en aquella España de principios del S.XXI a ella la culparon y ella se culpó, cuando no podemos perder el norte en que solo había un culpable, él.
Pasados 20 años, las heridas ya están cicatrizadas y Nevenka ha decidido contar su historia para cerrar esa etapa y sinceramente creo que haciendo un favor enorme a todas aquellas que están pasando o han pasado por el mismo camino que ella.
Un relato que 20 después, todavía desprende dolor, miedo y angustia, pero también libertad y justicia. No os voy a engañar hubieron fragmentos que me fueron difíciles de ver, porque el calvario que tuvo pasar esta mujer fue dantesco, pero este relato ayuda a muchas.
Por lo que por supuesto que os recomiendo, lo podéis encontrar en Netflix, y como cuando os comenté el fin de semana de su estreno, quiero recordar las palabras de mi madre cuando la vio en televisión: Pobre criatura, si está calaverica, no está mintiendo. Esas palabras de mi madre siempre se me han quedado grabadas en la cabeza y me sirven de guía para jamás poner en duda la palabra de una mujer que manifiesta haber sufrido algún tipo de violencia por parte de un hombre.
Sororidad hermanas, escuchar y no realizar juicios de valor a otras que deciden compartir sus testimonios cuando quieren y cómo quieren. Para la violencia que sufrimos las mujeres no hay patrones, así que dejémonos de suciedades entre nosotras y apoyémonos, porque llegar a dar la cara es un acto muy difícil.
Muchos besos rinconeros y rinconeras, y de nuevo, muchas gracias Nevenka.
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