lunes, 7 de diciembre de 2020

Los dimes y diretes de una corte misógina: The spanish princess



Para mi hay una clara diferencia entre Netflix y HBO, la primera tiene mucho cartel aunque en ocasiones la calidad en determinados momentos esté en duda, y para la segunda, menos es más. Contando HBO entre su cartelera con títulos y series de una alta calidad.

Hace un año y medio, en un finde semana que mi chico trabajaba, entrando en HBO descubrí por casualidad una trilogía de la que ya os hablé en su momento:

- La reina blanca
- La princesa blanca
- La princesa española

Todas rodadas en un formato telenovelesco, pero que a mi en particular me gustaron mucho, porque tienen como fondo la historia y en particular la historia de Inglaterra, y acotando más, de su realeza. 

Para mi total y absoluta sorpresa hace un mes y medio vi que se había estrenado la segunda temporada de la última de la trilogía, La princesa española (The spanish princess). Una temporada más oscura hasta en sus tonalidades según van avanzando los capítulos, en su trama, en sus personajes, en la historia.


En la primera temporada se nos mostraba una suerte de historia de iniciación con toques de novelón, de la entonces princesa Catalina (hija de los Reyes Católicos), quien al quedar viuda, vuelve a casarse con quien se convertiría en el rey Enrique VIII, nada menos que el hermano del fallecido Arturo de Gales, y quien además conseguiría junto a su esposa el cariño de la gente de Inglaterra.

Pero a pesar de que esta segunda comienza con las alfombras rosas, aborda de presión a la que fue sometida la reina Catalina por tener un heredero en un clima en el que no se permitía tomar decisiones fuera de los deberes de su reinado y de los pormenores políticos y diplomáticos.


El equilibrio entre el intento de ser madre, preservar la estabilidad de un matrimonio que se va deteriorando, y seguir proyectándose como líder, terminará por ponerla de cara a sus miedos y debilidades, dos estados que los factores externos no la dejan transitar con libertad, porque la monarquía y la presión sobre ella pesaba y asfixiaba.

Tanto Catalina como Enrique tienen mayores desafíos por la posición en la que se encuentran, y a esto de le suma buscar un heredero. Se podría considerar una historia de amor que debe mantenerse con vida en un escenario que no siempre juega a favor, pero ¿A favor de quién?

Es un relato que muestra muy bien la presión a la que eran y creo que son sometidas la mujeres de la realeza por dar herederos a las coronas, como esa presión es tan alta que la verdad no me extraña que no pudieran concebir, porque parece que la única responsabilidad es de ellas.

LO QUE MÁS ME HA GUSTADO DE ELLA:

- Salir de ese tono naif, y mostrar la crudeza de la vida de las mujeres en la Corte, da igual tu rango, tu vida no te pertenece y lo que se espera de tu cuerpo a mi me parece indecente, pero claro están en el siglo XV. Aunque ¿las cosas han cambiado mucho? En fin, me reservo mi opinión.
- Una Catalina fuerte, decidida, valiente pero muy vulnerable, que se castigaba por no poder dar un heredero y se consolaba con Dios.


- Una dirección artística que te hace mojarte con la lluvia inglesa y llenarte los pies de barro.
- Una buen trabajo de maquillaje y peluquería.
- Verla en versión original, porque la en esta serie en particular, el doblaje quita de importancia a cada gesto o palabra de los actores y actrices.
- El principio del fin de una dinastía.
- Como a pesar de que su condición femenina las ponía en la retaguardia, ellas se revolvían y querían ser dueñas y señoras de sus vidas y camas.

Siendo sincera esta segunda temporada me ha gustado mucho más que la primera, porque esa oscuridad que va adueñándose de todo es abrumadora.

En estos días se cumplen diez años que mi chico y yo hicimos nuestra primera y espero que no última visita a Londrés, y tengo muy presente aquel tour a la Torre como un momento muy especial del viaje, y eso que desde que salimos de Madrid todo fue mágico. 

¿Os recomendaría esta serie? Sí, porque es entretenida, y como dice el refrán el saber no ocupa lugar.

Así que muchos besos rinconeros y rinconeras y dentro de un rato os veo con otra serie de sello HBO.









No hay comentarios:

Publicar un comentario