El documental del absoluto y completo terror: Jeffrey Epstein, asquerosamente rico.

Asquerosamente rico, sucio, repugnante, un delincuente de los más peligrosos que han existido para la vida de las mujeres en general y las menores en particular, cosa que es todavía más vomitiva. 

Este primer documental que siento en este domingo, me daba mucho miedo de ver, y en casa a medida que íbamos avanzando sentíamos muchos sentimientos y emociones como:

- Asco                    - Dolor

- Rabia                  - Suciedad

- Angustia             - Vergüenza

Te recorre un sentimiento de indefensión todo el cuerpo de ver como una persona podía actuar y hacer lo que le diera la gana, amparado en su repugnante dinero, y que tuvieran que pasar décadas para que a este tipo le sentarán delante de un juez.

Esta docuserie se apoya en testimonios de víctimas para analizar cómo el agresor sexual convicto Jeffrey Eipstein utilizó su fortuna y poder para llevar a cabo sus abusos. Epstein, era un conocido financiero neoyorquino con gran influencia social y política en la ciudad hasta su acusación y condena por solicitar prostitución e incitar a la prostitución a menores, se ahorcó en su celda del Centro Correccional Metropolitano en Manhattan en agosto de 2019, en circunstancias por aclarar.

Este documental es una infrahumana radiografía en el que los pilares son:

1. El poder

2. El dinero

3. La impunidad

Muchos años donde este monstruo que como nos narra en la sinopsis de la serie, se ahorcó cuando empezaba a ser juzgado, dejo tras de sí, vidas arruinadas por sus prácticas y hechos, además de un escándalo judicial para arrancarse la piel a tiras, porque es inentendible que estas cosas sucedan y corroborar como con dinero hay veces que todo se compra, incluso la justicia.

Aunque os debo decir que hubo un determinado momento en el que en mi casa me tuve que levantar a vomitar, creo que la docu serie es un relato necesario, como sociedad debemos exigir que se haga justicia con las centenares de víctimas que le padecieron a él y a sus amigos y amigas, caiga quien caiga, aunque sea la realeza.

Sentí un terror tremendo cuando se fueron abriendo las capas de la cebolla, y la verdad es que espero que ésto no quede aquí porque hay muchas personas que tienen que dar explicaciones y pagar por los actos que cometieron.

¿Os lo recomendaría? Si, porque creo que al horror hay que ponerle cara y exigirle justicia.

Muchos besos rinconeros y rinconeras y espero veros dentro de un rato con otro documental de parecida temática que puso sobre las luces a la Selección de Gimnasia más eficiente de los últimos 20 años.