Como os decía ayer nada como unas buenas vacaciones para tener tiempo para ver todo aquello que siempre piensas "lo veré cuando tenga tiempo"...
Ayer os hablaba de la película documental sobre Camarón, y hoy me siento para compartir el documental en formato serie que también ha realizado Netflix sobre la figura de José, un tipo humilde, con talento, que vivía la vida a su manera pero con la premisa de expresarse a través de su música porque era un hombre de pocas palabras, pero marcó un antes y un después en la historia de la música y en especial del flamenco.
Un palo en el que algunos y algunas puristas le tacharon de "traidor" pero que no les quedo más remedio que rendirse ante la inmensa garganta de este gaditano internacional.
Durante seis capítulos esta segunda parte, se apoya en un gran número de personas que conocieron a Camarón, lo que nos permite descubrir algo más de su carácter y adentrarnos en la evolución del cante desde los años 50.
Las voces de Lela (amiga de la infancia), Curro Romero, Tomatito, la familia Carmona, Jose Merce, Lolita, Niña Pastori, o su mujer e hijos e hijas, nos invitan a hacer un recorrido sobre su voz a través de nuevo de un archivo familiar compuesto por fotos agendas, libretas, documentos gráficos, como la voz de su madre Juana, que era pura magia.
Todo representado de manera artesanal e innovadora, en palabras de su director "vemos a Camarón como era, al desnudo, con su timidez, su grandeza como artista. Una persona muy familiar y alguien que como se dice en el documental, le llegó a poder el personaje, porque que lo divinizarán le pesó mucho".
Un recorrido cuidado en el que se tocan casi todos los aspectos de la vida tanto personal como artística del cantaor, haciéndonos en mi opinión la fragilidad de esa portentosa voz, al que no le gustaban las palabras habladas solo las cantadas, porque ahí, en su cante es donde el se sentía cómodo y dejaba ver como el flamenco podía salir de su zona de confort y llegara lugares inexplorables, añadiendo nuevos instrumentos y melodías que hace que a día de hoy Camarón siga siendo un personaje único y irremplazable.
Haber tenido una figura así en nuestro país es para hacernos romper la camisa a todos y todas ante el increíble talento de este gaditano universal, al que su familia recuerda con emoción porque el mundo perdió a Camarón pero su familia perdió un marido, un padre, un abuelo...
No me queda otra que recomendaros esta serie porque en serio se pone en valor su figura, su importancia y la gran labor que realizó este señor por el flamenco, por la música.
Muchos besos rinconer@s y mañana vuelta a la rutina, a los horarios impuestos, mañana vuelta al trabajo con un verano vivido de forma tranquila en la compañía de las personas que hacen que mi corazón siga latiendo.
Muchos besos y espero mañana poder tener tiempo de sentarme por aquí :) :) :) :) :)
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