Hace 16 días, exactamente el 31 de enero a las 12 horas desde la Plaza de Cibeles a la Puerta del Sol, la concentración versus manifestación que convocó Podemos, no para protestar sino para celebrar que el cambio puede ser que quede menos para que llegué.
Y si estáis leyendo estas líneas, creo que os preguntaréis ¿Y fuiste?
Esta foto muestra claramente mi contestación ¿No?
Yo que me considero una mujer que cree firmemente en la democracia y que os aseguro pienso que las cosas se pueden hacer de forma diferente y no caer en la conspiración del miedo, me gustaría compartir con vosotr@s los motivos que me llevaron a ir:
1º Porque a mi el cambio no me da miedo, lo que me da miedo es que las cosas no cambien y nos hagan creer que el sistema podrido y corrupto que tenemos es la única solución y la única vía posible a la salida de la situación de nuestro país.
2º A estas alturas de este post negar que soy afín a Podemos es ridículo, porque sí lo soy. Y no soy ni bolivariana, ni proetarra, ni de extrema izquierda. Soy una mujer de 30 años, a la que el partido al que le di mi voto, el PSOE me ha defraudado y confió en gente joven y preparada que quieren cambiar el rumbo y la situación de nuestro país. No estoy de acuerdo con todo lo que Podemos o algunos de sus integrantes dice, porque para mi Venzuela no es ningún ejemplo a seguir. Pero también pienso que seguir bajo el zapato de la Troika y de Alemania no es ninguna vía de recuperación, nos digan lo que nos quieran decir. ¿Por qué dónde esta la recuperación Rajoy?
¿Cómo que usted ha cumplido el 83% de su programa electoral?
3º Porque creo que generar miedo en la gente, lo que a mí me ha provocado a nivel personal es valor, valor de salir a la calle y decir "no tengo miedo a lo nuevo" aunque esto nuevo tiene que convencerme con ideas, con proyectos, con propuestas no sólo con críticas.
De igual manera os diré que tienen que explicar cómo y dónde van a sacar el dinero para sacarnos de esta crisis de la que los ciudadan@s no somos responsables.
Y así os podía poner un sin fin de razones que me llevaron a salir a la calle ese día.
¿Qué ví allí? pues mucha gente, muchísima, venida desde muchos puntos de España con bolsas llenas de ilusión y esperanzas de cambio y con la esperanza de que Podemos no defraude y sea fiel al espíritu con el que nació, recuperar la soberanía para el pueblo.
Y ese 31 de enero no solo había gente joven, había abuelos, habían familias, habían inmigrantes, habían niñ@s, habían personas con discapacidad... todos con el corazón latiendo fuerte de que sí, empieza el tic tac del cambio. Y de que contra el miedo lo mejor son las sonrisas.
Va a ser un año electoral largo, en el que se van a ver y a oír muchas cosas y sinceramente os reconozco que todavía no se sí votaré a Podemos porque como os he dicho antes todavía tienen que contar su programa y que éste me convenza en darles algo muy importante mi voto, lo que sí se es que yo no tengo miedo y quiero y deseo un cambio.
Yo no tengo miedo y quiero y deseo que se acaben las puertas giratorias.
Yo no tengo miedo y quiero y deseo que la política sea un ejercicio de mujeres y hombres decentes y honrad@s.
Yo no tengo miedo y quiero y deseo que los corruptos y delincuentes estén entre rejas y no campando por las Cámaras el Estado.
Yo no tengo miedo y quiero y deseo un país que no ceda a la Troika y defienda los derechos de los ciudadanos por encima del dinero y los bancos.
Yo no tengo miedo y quiero y deseo un país en el que la Sanidad y la Educación sean nuestros dos fuertes pilares.
Quiero y deseo muchas cosas pero sobre todo que no me engañen ni tomen el pelo porque contra el miedo sonrisas.
Feliz semana rinconer@s y hasta mañana :) :) :) :) :)
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