Leer a Elvira Sastres es un viaje al centro de los sentimientos y emociones: Las vulnerabilidades

"La narradora de esta historia, Elvira, recibe un mensaje en una red social: una joven llamada Sara afirma haber sido víctima de abuso y se encuentra en una situación desesperada. Elvira no duda en ofrecerle su ayuda, y le abre las puertas de su intimidad, aunque nada es suficiente para quien no halla consuelo. Poco a poco, Sara se convierte en una presencia asfixiante pero necesaria en la vida de una Elvira entregada a salvarla de sí misma”.

Desde que vi que Elvira Sastre sacaba nuevo libro, esta vez, novela, sabía que lo iba a tener en las manos, tardaría más o menos, pero lo leería. El momento fue en plena crisis por el brote, donde en un mes me leí más de 10 libros, pero es que en las páginas necesitaba encontrar el sitio donde no pensar y tratar de que fueran pasando los días, con sus noches y unos dolores que han hecho que mi cabeza en algún momento se hubiera quebrado.

Una novela que me hizo pasarlo mal, porque esos dos personajes -espero que ficticios- podrían ser cualquiera de nosotras, porque mostrarte vulnerable está visto como algo malo, cuando es en las vulnerabilidades donde encontramos el camino y la fuerza.

Las vulnerabilidades es una historia de suspense psicológico que gira en torno a la relación de poder y dependencia que se establece entre dos mujeres heridas y que cuestiona las consecuencias de un acto tan aparentemente altruista como ayudar a los demás.

Dice la sinopsis que que es una historia de suspense a lo que yo añadiría:

- De terror.

- De poder.

- De miedo.

- De ansiedad.

- De verdad.

Hubo un momento en que planteé dejar de leerle, porque se me estaba haciendo duro, pero al tirar para adelante, casi en el último tercio de la novela, viene la gran sorpresa, el cambio que todo lo gira y desmonta lo anteriormente leído.

Las literatura de Elvira es desgarradora con las emociones y sentimientos por delante. Un forma de escribir elegante, bella, sutil y hermosa.

Las vulnerabilidades fue un viaje bello, porque hoy 5 de agosto puedo deciros que lo le leí en abril, pero son tantas las historias que estoy teniendo en las manos este 2024, que no hay lunes suficientes para poder compartiros lo.

¿Nos vemos mañana?

:) :) :) :) :)