Autenticidad a la española: Todo lo otro

Hace unos meses llego a HBO Max, una nueva ficción con sello patrio, Todo lo otro, una serie guionizada, dirigida y protagonizada por la actriz Abril Zamora, en la cual se nos enseña la vida de un grupo de amigos, con sus alegrías, sus penas, sus borracheras, sus sueños por cumplir, sus trabajos precarios, sus amores, sus follamigos...

Cuenta sin filtros y sin juicios, la historia de un grupo de treintañeros atrapados en unas vidas que no eran las que soñaban mientras intentan avanzar y encontrar su hueco en Madrid.

Que difícil de digerir es llegar a una edad en la que corroboras que no estás viviendo la vida que soñaste, que no has cumplido los sueños vitales de cuando eras pequeño o pequeña. Te plantas delante de esa vida y te dices: No es lo que yo quiero, pero ¿Qué hago? Porque claro hay que tener en cuenta que hacernos mayores nos lleva unas determinadas responsabilidades:

- Pagar una casa.

- Trabajar a lo mejor en algo que no te gusta.

- Los gastos de comer, luz, agua...

Vamos lo viene siendo hacerte mayor.

Todo ello a través de la mirada de una mujer que ha llegado un punto en su vida en el que parece que todo se ha caído y sigue soñando con ser feliz y estar con la persona de la que se ha enamorado, pero oye que puede ser que ese amor no sea correspondido, ¿Eso es el fin del mundo? Como decía un refrán de mi niñez "el amor idiota tú por él y él por otra".

Todo lo otro, es una serie de capítulos cortos, en los que poder vernos reflejados o reflejadas en cualquiera de los personajes que fluyen en su día a día por ella. ¿Quién no soñó con trabajar en aquello que le gustaba? ¿Quién no tiene un trabajo precario con el que subsistir es un acto de fe más que una realidad? ¿Quién no soñó con llegar a los 30 con pareja estable, casa y quien sabe si descendencia?

La verdad es que la serie me gustó mucho, y le di la oportunidad gracias a HBO de ir disfrutándola semana a semana. Agradezco mucho la apuesta por un reparto a lo mejor tan conocido para el gran público, pero que capta, engancha, crees y gusta.

¿La habéis visto? ¿Os la recomendaría? Sí, porque el trabajo de todos y cada uno de ellos y ellas en esa ciudad tan bonita que es nuestra Madrid, merece la pena. Una ficción costumbrista, realista y hasta en los momentos de mayor depresión, vitalista.

Muchos besos rinconeros y rinconeras y esta tarde noche nos vemos con LA SERIE.