miércoles, 8 de diciembre de 2021

12+1... 13 años que la magia y los ojos azules más bonitos llegaron

 

Detrás de ese nombre de origen vasco que nunca había oído, desde hace 13 años existe la magia, los ojos azules, el amor y la guinda que todo buen pastel necesita para que sea delicioso.

Hace 13 años en mi primer viaje de pareja a Barcelona -porque no podía ser otra ciudad- visitando La Pedrera al mirar el teléfono, vi como unas 10 llamadas perdidas de mi madre y no eran ni las diez de la mañana, mire a mi chico y ya llorando le dije: "no me lo puedo creer, que ya ha nacido". Y vaya si había nacido, hace 13 años que nació mi primo el pequeño. Un niño con una carne muy blanquita, de ojos azules y bueno, muy bueno. Y eso que no le pude conocer hasta más de una semana después porque de ese viaje a la ciudad condal además de:

- Ir por primera vez al Camp Nou.

- Comprarme mi camiseta del reciente entrenador del Barça, Xavi Hdez. 

- Ver por última vez a mi tía Taqui.

- Quedarme sin zapatillas porque una olita de nada en la orilla de la Barceloneta me tragó.

- Mi primera visita a la Sagrada Familia por dentro.

- Pero sobre todo una gripe de narices porque estuve bien bien mala.

Como todo lo bueno en esta vida, las cosas o personas buenas se hacen esperar y a mis lágrimas telefónicas con mi tía porque estaba mala y no podía conocer a Izan, se sumaron las lágrimas de la primera vez que le vi y como quien no quiere la cosa, PLAS, mi tía me lo puso en brazos y ahí tenía a ese pedacito de carne nacido del amor -un amor precioso, largo, respetuoso-, que también era un pedacito de mí, de mi familia, de esa que hacia un año y medio se quedo coja cuando falleció mi abuelo y que el son de su sonrisa volvió a llenarla de vida, alegría y amor.

Porque eso es mi primo: 

VIDA, porque el tiempo es ese tic tac que no perdona y va pasando, pero ese tic tac, cuando ves crecer a otro merece la pena vivirse y exprimirse. Una vida que comenzaba y que estos recién estrenados 13 años no puede traer cosas que no sean bonitas, porque él es mágico, es luz, es cariño, es amor, es adolescencia, es esa tan temida edad del pavo, que pasará como a todos y todas, pero sobre todo son buenos momentos porque tengo la suerte de disfrutar de su compañía y que de momento él siga disfrutando de la mía.

ALEGRÍA, porque todo con él es alegría, da igual que sea un cine, que un juego de mesa o una conversación... Izan me demuestra que este mundo lo habitarán hombres buenos como él, con empatía, valores, educación, nobleza y dulzura.

AMOR, porque todo lo que sea por él y con él, a mí me llena y desborda de ese sentimiento que ha estado en mí desde que me enteré que sería prima, hasta el día de hoy. Y toda la vida que nos rondará rubio.


Así que a mi rubio, a mi niño mago, a Izan solo darte las gracias, gracias primo por habernos devuelto la felicidad; por habernos vuelto hacer vivir con emoción cada primer paso, sonrisa y caca que salía de ti; por hacernos vivir con alegría cada momento que podemos pasar juntos; por hacer que el futuro fuera distinto porque tú vas a formar parte de él.

Muchas felicidades cariño mío y solo deseo que vivas, respires, cantes, bailes, llores, te caigas, te levantes, juegues, saltes, llores, te enfades, estudies, trabajes... o lo que te sea que te apetezca como te salga del alma, que tu familia, y por supuesto, yo siempre estaré aquí para que me dejes seguir disfrutándote.

Ser tu prima es un regalo que no puedo pagar pero una suerte que no quiero dejar de vivir.

Sé feliz y no cambies esa pureza, nobleza y empatía que te caracteriza, no dejes que la vida te cambie, irás cumpliendo años y creciendo porque es ley de vida pero, jamás abandones ese niño tan lleno de magia que has sido desde hace 13 años que naciste, te quiero muchísimo rubio.

:) :) :) :) :)



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