sábado, 23 de octubre de 2021

Cinismo, ironía, León de Aranoa y Bardem: El buen patrón

 


Hace una semana que llegó a las salas de cine, un auténtico peliculón, con pocos artificios técnicos, porque la grandeza la encontramos en un guion cuidado y medido y, en las actuaciones monstruosas de un reparto en el que a la cabeza encontramos a Don Javier Bardem. Un monstruo escénico, capaz de hacernos creer que es un asesino en serie, un médium, un parado de larga duración, Ramón Sampedro... o como en esta película un patrón/padre de una empresa de balanzas, ahí para hurgar más en la herida de encontrar en equilibrio de ser un buen jefe o un auténtico cabronazo.


Blanco, un carismático propietario de una empresa que fabrica balanzas industriales en una ciudad española de provincias, espera la inminente visita de una comisión que decidirá su destino y la obtención de un premio local o la Excedencia Empresarial: todo tiene que estar perfecto para la visita. Sin embargo, todo parece conspirar contra él. Trabajando a contrarreloj, Blanco intenta resolver los problemas de sus empleados y empleadas, cruzando para ello todas las líneas imaginables, dando lugar a una inesperada y explosiva sucesión de acontecimientos de imprevisibles consecuencias.

LO MÁS INCREÍBLE DE LA PELI:

- Javier Bardem en ese personaje que a medida que pasan los minutos vas viendo lomiserable y despreciable que puede ser, pero con aparente amabilidad. Contenido, correcto, afable, de trato cercano, por el que parece no pasar nada pero que en una escena en particular en el baño les ves flaquear, y oye...Bardem en estado puro, volviendo a mostrar que haga lo que haga nos lo creeremos. Para mí, es uno de los mejores actores del mundo.


- Ese paso de los mitos costumbristas, tranquilos como de aparente normalidad que comienza con un hecho que según pasan los minutos, el espectador o espectadora le puede dar un sentido o un fin en ese entramado de balanzas.

- El guion, sorprendente, cínico, irónico, metiendo unos guantazos figurados que te desencajan la mandíbula.

- Ese arte de Fernando León de Aranoa de mostrar la vida real en sus películas, con personajes que o bien podríamos ser nosotros o nosotras, o alguien a quien conocemos. Ese llamado cine social, que a mí me alucina.


- El humor y el cinismo extremo.

- Planos directos a la cara donde el sudor, la angustia, el enfado o el placer se juntan para un tándem explosivo de historias que te recuerdan que aunque todos y todas tengamos nuestras vidas, el trabajo es imprescindible o primordial. Estamos en las manos de un sector empresarial, que en ocasiones da verdadero miedo.

- Una banda sonora costumbrista, afable y tranquila.

- El poder de la lucha de los trabajadores o trabajadoras como armas de mejora para todas.


El buen patrón ha sido la elegida por La Academia de cine española para ir a los Oscar de Hollywood, y aunque tenía competidoras fuertes como Mediterráneo o Madres paralelas, nada como ir al otro lado del charco a mostrar como es nuestra sociedad, y si es de la mano de Aranoa y Bardem, mejor que mejor.

¿La habéis visto? ¿Os la recomendaría? Por supuesto, porque es una gran peli.

Muchos besos rinconeros y rinconeras y en este sabado donde el único plan que tengo es estar en casa, contarme en que andáis :) :) :) :) :)

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