En el Teatro Cofidis Alcázar de Madrid hasta el próximo 4 de julio podemos ir a ver a la bailaora canaria María Juncal, con un espectáculo luminoso y optimista, un cancionero sobre el encargo de vivir en el que recupera la tradición de contar historias de persona a persona, un romancero sobre el camino.
El espectáculo es un homenaje al instinto de superación tan importante en estos tiempos que nos ha tocado vivir, un abrazo al arte, la cultura y la vida. En palabras de la propia artista, se trata de un espectáculo hecho a mano, totalmente artesano, cuyos únicos efectos especiales son los de la emoción.
Se divide en cuatro canciones, cuatro expresiones distintas, en cuatro momentos diferentes de la vida:
- La canción de la piel sin mácula.
- La canción del caminante.
- La canción del agua.
- La vida es un romance.
Todas tienen un hilo conductor que no es otro que mostrar al espectador o espectadora un espejo sobre las emociones que confeccionan el relato de una vida. Todo desde esa esencia de baile que distingue a María Juncal como una artista de alturas inalcanzables.
Si vais a verlo por favor contarme que os ha parecido, pero creo que el flamenco es esa música y ese arte que se te mete dentro con su tac tac y nos hace sentir todas las energías y emociones fluir por nuestro cuerpo.
Muchos besos rinconeros y rinconeras y espero veros mañana con los estrenos de cine de la semana.
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