Que complicado es sentarse a comentar este documental, habiendo compartido cada año las diferentes películas que ha estrenado Woody Allen, pero enfrentarte a la realidad y al testimonio demoledor de una mujer como es hoy en día Dylan Farrow es necesario para tomar conciencia de la gravedad y poner un punto y final en siempre poner en duda los testimonios de mujeres, adolescentes o niñas, cuando dicen haber sido víctimas de algún tipo de violencia.
Hoy tenía pensado compartir la última película del director, pero desde ahora mismo os comparto que jamás lo volveré a tener sentado en este rincón y por supuesto no volveré a ver ninguna de sus películas, porque da igual el talento, cuando hablamos del daño a una mujer, que durante décadas no ha cambiado su discurso, siempre ha contado lo mismo. Entonces ¿Por qué no se la ha creído?
Miniserie documental de cuatro episodios que indaga en el pasado y profundiza en la historia de uno de los escándalos de Hollywood más conocidos: las acusaciones de abuso sexual contra Woody Allen que supuestamente cometió con Dylan, hija fruto de su relación con Mia Farrow, así como el consecuente juicio por la custodia y posterior impacto de la relación entre Allen y Soon-Yi, hija de Farrow.
Aunque una vez fueron una de las parejas más queridas del panorama estadounidense, las consecuencias de su ruptura y posterior enfrentamiento mediático cambiaron para siempre la vida de ambas figuras, como también la de sus respectivas familias. El documental incluye películas caseras, documentos legales, pruebas policiales y audios nunca antes escuchados sobre las susodichas acusaciones.
He leído en más del 90% de las críticas de expertos que dicen que este documental trata de desprestigiar a Allen ¿Desde cuándo desprestigia el testimonio de una mujer que no lo ha cambiado en más de 20 años? ¿Desde cuándo se tiene más en cuenta las valias de alguien como profesional, desprestigiando a todo aquel o aquella que hable en contra de esa persona?
Yo jamás he puesto en duda ni pondré el talento del cineasta, pero en estos capítulos no se nos habla de su trabajo, sino del hombre, del padre, del marido... y todos los cadáveres que dejo en su paso por la familia de Mia Farrow, una mujer a la que se humilló y que lo único que hizo, es proteger a su familia, proteger a su hija. ¿Por qué la justicia no protegió a esta mujer y a su hija?
Estas son preguntas que solo podrían contestar los que intervinieron en el caso, pero los relatos y las pruebas tienen mucho peso y duelen, porque más de 20 años después, se sigue sin hacer justicia con esa niña que un día fue Dylan, y que a día de hoy lo único que quiere es que se sepa la verdad.
Estoy cansada de que siempre se ponga en tela de juicio los testimonios de las mujeres, primero las pedimos valentía para salir del pozo, pero una vez que la tienen las dejamos solas, las juzgamos, las ponemos en duda y no las ayudamos, y eso en pleno 2021 es una tragedia.
No voy a entrar con el mantra de las denuncias falsas, porque de todas las que se pusieron en 2020, solo 7 eran falsas, 7 de miles, por lo que solo voy a entrar a valorar los hechos, los testimonios, y el jamás volver a poner en duda a una mujer.
No se si habéis visto este documental, pero lo tenéis en HBO, es duro de digerir, quizás un poco sensacionalista, pero no lo es más que el camino que ha tenido que recorrer esa familia.
Muchos besos rinconeros y rinconeras, y por cierto alejándome del documental, solo os digo que la última película de Allen, Rfkin´s Festival es un auténtico bodrio.
Hasta mañana :) :) :) :) :)
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