sábado, 14 de noviembre de 2020

Plan para el fin de semana: Desempolvar las vergüenzas del Museo del Prado con las mujeres: Invitadas

Desde el pasado 6 de octubre y hasta el 14 de marzo del 2021, el Prado en su vuelta a la nueva normalidad ha apostado por una exposición en el que el foco se pone en las mujeres, las grandes silenciadas, marginadas y vilipendiadas del mundo del arte en general y del Museo del Prado en particular, con su exposición Invitadas, fragmentos sobre mujeres, ideología y artes plásticas en España.


El objetivo es ofrecer una reflexión sobre el modo en el que los poderes establecidos defendieron y propagaron el papel de la mujer en la sociedad a través de las artes visuales, desde el Reinado de Isabel II hasta su nieto Alfonso XIII.

En este tiempo el Museo del Prado se convirtió en el elemento central de la compra y exhibición de arte contemporáneo y desempeñó un papel sustancial en la construcción de la idea de escuela española moderna.


La expo, está ordenada a través de episodios significativos de este sistema artístico, que genera un conjunto de escenarios para reflexionar desde la colección del propio Museo, y analizar algunas de las consecuencias más profundas de una mentalidad compartida.

En todos estos espacios las mujeres que aparecen son pocas veces protagonistas por voluntad propia y rara vez están en los lugares que desean; sólo fueron invitadas incómodas en la escena artística de su tiempo.

He leído que el compromiso del Museo del Prado es la conservación, estudio y difusión de sus colecciones en su deseo de visibilizar obras no siempre al alcance del público mediante su incorporación a nuevas normativas.


La verdad es que no es una exposición barata, pero creo que es una ocasión única de poder obras que llevan muchas décadas encerradas en los sótanos del Museo, pero no porque no sean dignas de exponer, sino porque están hechas por mujeres o tienen en el foco a éstas.

En torno a Invitadas, ha habido algunas polémicas, como que se tuvo que quitar un cuadro porque decían que estaba realizado por una mujer cuando no era cierto, y aunque valoró el esfuerzo del Museo en el fondo también me parece algo hipócrita, porque todas las sesiones o conferencias en casi su totalidad están siendo dadas por hombres, lo que de verdad no entiendo, porque si estamos hablando de mujeres, porque éstas siguen siendo silenciadas. Me suena a ese término de la monarquía despótica "todo por el pueblo pero sin el pueblo".


En verano os compartí un libro que me apetece mucho volver a recomendar porque resume la invisibilización de las mujeres en el mundo de los museos y aunque tenga mis contras en las formas de esta exposición, estoy deseando ir al Prado y verla porque me han hablado maravillas de personas que la han visto en primera persona.

¿Si vais me contáis que os ha parecido vale?

Por aquí os dejo el libro que me hizo plantearme muchas cosas que jamás había pensado


Recordar que todo el mundo de la cultura está haciendo un esfuerzo enorme porque sus espacios sean seguros tanto para visitantes como para empleados y empleadas, por eso nada mejor como una visita el Museo del Prado, ir andando por sus pasillos, respirando ese aire filtrado (a través de las mascarillas, claro) de arte e historia.

Muchos besos rinconeros y rinconeras y espero veros mañana con un documental que a mi personalmente me puso los pelos de punta.

:) :) :) :) :)




No hay comentarios:

Publicar un comentario