Mucho le debemos a Clara Campoamor, y de su puño y letra salió esta maravilla, El voto femenino y yo, mi pecado mortal

En la vuelta a la última tienda que visité allá por el 7 de marzo, La casa del libro, descubrí el libro de una de las mujeres vitales para el movimiento feminista español. Una mujer valiente que luchó mucho en el lugar donde había sido elegida por hombres, para conseguir algo de una importancia clave para las mujeres, el derecho al voto.

Clara Campoamor, que en mi opinión es la gran olvidada, la gran denostada, cuando realmente fue la que plantó la primera piedra de un movimiento que si no hubiera sido por la dictadura de Franco, había sido imparable.

Ella asumió que se la cargarían todas las culpas sobre conceder el sufragio a las mujeres, pero el mal trato que sufrió creo que fue atroz, injustificado y propio de una sociedad machista que en ese momento presumía de luchar por las libertades de las personas, lo que se olvidaban decir, es que solo trabajaban por las libertades de los hombres, porque nosotras, no estábamos preparadas para participar en nuestra sociedad, esa por la que también habíamos trabajado y luchado.

La apasionada y brillante campaña de Clara Campoamor a favor del derecho de la mujer al voto, pese a la oposición de buen aparte de la izquierda y también de su propio partido, logró que el sufragio universal se implantará en España a partir de 1931.

Pero esa victoria tuvo como precio el progresivo aislamiento de Clara Campoamor en la escena política española de la Segunda República.

A partir de 1934, año en el que abandona el Partido Radical y le deniegan la entrada en Izquierda Republicana, Campoamor se convierte en una republicana sin partido.

En 1935, Campoamor escribió este ensayo que es un ajustado relato de defensa de su actuación y de su lucha a favor de los derechos de la mujer, pero también de su soledad política; soledad que o lo abandonaría ya nunca yq ue habría de continuar durante la guerra civil y su posterior exilio en Argentina y Suiza.

Después de leer y ver multitud de escritos y documentos de la época de Campoamor, no se porque le sorprendió tanto a la derecha pero sobre todo a la izquierda que quisiera luchar por el voto, porque cuando encabezó la lista por Madrid por el Partido Republicano, su programa era:

1. Derecho al voto femenino.

2. Derecho de la mujer a decidir sobre su maternidad.

3. Ley del divorcio.

4. Ley del derecho del niño y de la niña.

5. Abolición de la pena de muerte.

Un libro que para mi imprescindible de leer para conocer de puño y letra de la mismísima Campoamor, donde nos cuenta que la pasaba por el cuerpo durante esas semanas de trabajo para la consecución del sufragio para la mujer y cómo, una vez conseguido, fue tratada, ridiculizada y culpada de sin sentidos, como que la mjer no iba a valorar ese derecho y que antes de ejercerlo, nos debían preparar ¿Preparar, para qué?

En fin que me quiero despedir con las palabras de esta gran mujer, y por supuesto, recomendando esta lectura vital para la historia de la mujer española:

"Al encontrarme en la Cámara con la oposición de elementos republicanos, hombres y mujeres, aquello consagración, yo sentí vibrar en mi, imperativo, lesionado, el espíritu de mi sexo; vi con mayor claridad, por los elementos de la oposición, que en ello iba el futuro de España y que mi deber era luchar por conseguirlo, reuniendo todos mis recursos dialécticos y toda mi capacidad de lucha".

Muchos besos rinconeros y rinconeras y espero veros mañana con el gran final de la Saga del Baztán

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