viernes, 1 de mayo de 2020

En su final encontramos la gran sorpresa: El jardín de bronce


Hace un año más o menos que la serie argentina de la que siento hoy su segunda temporada, El jardín de bronce, me dejo clavada en el sitio.

Mi sorpresa la descubrí cuando al terminarla ví que había un asegunda temporada pero la verdad no encontraba el momento de comenzarla, hasta que hace unas semanas buscando por la HBO la vi y pensé ¿Por qué no?


La historia transcurre dos meses después del final de la primera temporada -cuando tras una década de búsqueda Danubio encuentra a su hijo y descubre que no es el padre biológico- , cuenta e diferentes líneas temporales un nuevo caso policial en el que se ve involucrado.

Se trata de una investigación que su amigo César Doberti, quién murió mientras la ayudaba a encontrar a su hija Moira, dejó inconclusa.

Un chico ha desaparecido y su madre la busca con desesperación, Danubio siente que empezó Doberti, y es casi como si se le debiera.


Al principio nadé en el desconcierto porque se mezcla la investigación actual de esa fiera escénica que es Joaquin Furriel con la relación con su hija que lleva más de diez años sin ver.

LOS QUE MÁS ME HA GUSTADO DE ELLA:

- Joaquin Furriel, que es un monstruo en cada palabra, en cada gesto, en cada escena...


- Poner en el foco los barras bravas y esa corrupción que hay alrededor de ellos en el mundo del fútbol
- Lo vivido por Moira los años que no ha estado son su padre
- Esa relación que no tiene nombre entre Danubio y la policía
- La corrupción de menores es asquerosa, pero como la utiliza para dar desarrollo a la historia es magistral
- Una madre nunca se rinde


- El investigador que no es policía pero parece que avanzó más que ellos
- Las apariciones de Doberti, que van marcando la pauta de los descubrimientos en la actualidad
- Esa ansiedad que va apareciendo a medida que se conocen más detalles
- El final. Esto es algo que me dejo petrificada porque ni me lo esperaba, y aunque me parecía arriesgado, echa el cierre para el porqué el chaval desaparece. Me dejo el corazón helado
Sientes sorpresa, dolor, estupefacción, y ahí descubres, que esta segunda temporada tenía mucha vida y la verdad es que la seguirá teniendo.

¿La habéis visto? ¿Qué os parece?


Verla porque no os dejará de sorprender.


Feliz día del trabajador y la trabajadora a todos y todas, en especial me vais a permitir a aquellos y aquellas que llevan semanas dejándose la piel para que estemos sanos y sanas, estemos vivos y vivas, y podamos seguir con la vida adelante. Sí, dentro de las paredes de nuestra casa, pero gracias a esa gente hemos comido, no hemos cogido infecciones porque han retirado la basura, han limpiado y desinfectado nuestras calles, y así un sin fin de ejemplos.

Hoy mi aplauso va a ir en especial a aquellos hombres y mujeres que han estado trabajando muy duro en el hospital de Ifema de Madrid, que hoy ha cerrado sus puertas y dejando la política aparte porque no creo que sea el momento, solo me sale darles las gracias por tanto, gracias por el esfuerzo, gracias por el trabajo que no solo se ha basado en lo clínico sino en lo humano que allí se estaba viviendo.

Como dice Rozalen en su canción Aves enjauladas, la calidad de la sanidad será intocable, pero ésto solo lo podremos conseguir nosotros y nosotras, porque cuando todo esto acabé deberemos exigir respeto y medios para estos profesionales que sin ellos y ellas no estaríamos donde estamos.


Muchos besos rinconeros y rinconeras y espero veros mañana con una película de dibujos que el tiempo en mi opinión no la ha tratado muy bien

:) :) :) :) :)

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