"Las series también son para viej@s" El método Kominski

- Diálogos sobre achaques
- protagonistas gruñones
- soledad
- frustración personal y profesional
- incertidumbres vitales

Muchos de estos temas y otros tratados desde un sentido del humor inteligente y sin cabida a la ofensa trata la segunda temporada de una gran serie, El método Kominski.

Una comedia dramática que en la primera temporada nos presentaron a un veterano actor, Sandy, cuya carrera nunca llegó a funcionar del todo, y que se gana la vida dando clases de interpretación, y su agente y sobre todo amigo Norman, recientemente enviudado y muy pesimista con todo y tod@s los que le rodean.

Hay amistades que traspasan la barrera de los años y son sinceras a la par de dañinas porque quien te mejor te conoce es el que no te lavara las orejas sino que te dirá la verdad aunque sea dura de oír y digerir, y quizás de eso trata esta serie, de la amistad, de los años, de la vejez, del paso de los años, de cómo aunque te niegues los años pasan ya no solo en tu edad, sino en tu cara y cuerpo.

Una amistad entre los dos actores llena de amistad-odio, pero sobre todo de nuevo nos han vuelto a demostrar que la lealtad es una palabra difícil de encontrar en otro u otra.

Desde hace algún tiempo como he leído en un artículo en internet las plataformas digitales amplian su oferta a la pequeña pantalla con el punto de mira en personajes que ya han pasado la edad de jubilación, pero no por eso significa que den menos guerra.

¿Qué podemos encontrar en ella?

- Sinceridad
- Buenos diálogos
- Un reparto equilibrado y comprometido
- Como la vida te termina comiendo y tu actitud de afrontarlo te marcará un antes y un después
- Formato de capítulos cortos pero no menos buenos

¿Os la recomendaría? Al igual que con la anterior temporada, poner en vuestro día a día a estos dos y comenzar a disfrutar

¿Para cuándo una tercera? Pues a eso solo nos lo puede responder Netflix.

Un beso rinconer@s y que grande es el señor Douglas

Hasta mañana :) :) :) :) :)